En teoría, los muffins son algo muy simple de hornear, pero en la práctica, hay mucha variación entre ellos. Algunos panaderos los hacen altos, ligeros y esponjosos, como un pastel, mientras que otros los hacen relativamente densos y de textura cercana. Algunos hornean muffins de gran tamaño con una parte superior extravagante, otros los mantienen lo suficientemente pequeños como para permanecer dentro de su vaso de papel. Cada panadero encuentra una zona de confort personal a lo largo de ese rango de variación y encuentra o refina recetas en consecuencia. Si te gusta la luz, aquí hay algunos consejos.
Mezcla
Una de las razones comunes para que los panecillos se vuelvan densos y masticables es la mezcla excesiva. La técnica estándar para hacer muffins es muy simple. Usted tamiza sus ingredientes secos y bate sus ingredientes húmedos. Luego, combina los dos, revolviendo hasta que se mezclen. Por lo general, solo toma de 10 a 12 golpes, como máximo, con su cuchara de madera. La masa, que debe ser grumosa y no suave, generalmente mostrará algunos puntos donde la harina no se ha mezclado por completo. Esta es una buena señal. No mezcle la masa hasta que esté uniforme y suave y no use su batidora de pie.
Harina
Su elección de harina también tiene relación con lo ligeras y esponjosas que serán sus magdalenas. La harina integral y otros ingredientes de granos, como la avena y el salvado, tienden a hacer que sus muffins sean más densos y pesados. Esto no es bueno ni malo, solo es una cuestión de preferencia personal. Sin embargo, si su objetivo son los panecillos más ligeros, use tres partes de harina blanca sin blanquear por cada parte de otra harina de grano. Esto agrega nutrición, pero mantiene las magdalenas ligeras. El uso de harina para pasteles o repostería en lugar de para todo uso también ayuda a darles un sabor más suave y esponjoso.
Levadura
Los panecillos usan polvo de hornear o bicarbonato de sodio, o ambos, para generar el "aumento" que los hace suaves y esponjosos. Use muy poco y no se levantarán lo suficiente, use demasiado y se levantarán rápidamente y luego colapsarán. Compare su receta con otras y vea cuánta levadura usan. Algunas recetas de muffins se mezclan como un pastel al unir primero la mantequilla y el azúcar y luego agregar los huevos y los ingredientes restantes. Este método es más complicado que el enfoque de "volcar y revolver", pero al untar la mantequilla y el azúcar se crean bolsas de aire que ayudan a las magdalenas a levantarse ligeras, escamosas y como pasteles.
Horneando
Su técnica de horneado es otro factor importante para hacer magdalenas suaves y esponjosas. Durante los primeros 10 a 15 minutos de cocción, el polvo de hornear y el bicarbonato de sodio reaccionan al calor, produciendo dióxido de carbono para hinchar las magdalenas. Para obtener el mejor resultado, precaliente su horno a 425 grados Fahrenheit, en lugar de los 350 a 375 F requeridos en la mayoría de las recetas. Una vez que las magdalenas estén adentro, reduzca la temperatura a lo que requiera su receta. Es muy importante no abrir el horno durante al menos los primeros 10 minutos hasta que finalice el levantamiento.