El período de tiempo entre la cena y la hora de acostarse es la zona de peligro para muchos. Es la hora del día en que puedes relajarte, y muchas personas buscan un refrigerio favorito para mejorar el simple placer de no hacer nada. Si bien comer un refrigerio saludable y equilibrado antes de acostarse puede mejorar sus capacidades de sueño y el bienestar general, comer demasiado o ciertos alimentos antes de acostarse puede plantear problemas.
Aumento de peso
El mito más grande que rodea la alimentación nocturna es que comer demasiado cerca de la hora de acostarse te hace subir de peso. Esto no es verdad. Comer más calorías de las que quema hace que aumente de peso, ya sea que las coma temprano o tarde. Por supuesto, muchas personas que comen bocadillos antes de acostarse eligen alimentos ricos en calorías, como helados o papas fritas, pero es el contenido calórico de estos alimentos, no el momento en que se comen, lo que causa el aumento de peso. Comer en exceso por la noche puede interrumpir el sueño y aumentar su apetito al día siguiente. Para esquivar estos riesgos, procure comidas y refrigerios saludables y equilibrados a lo largo de cada día. Si tiene hambre o está inquieto antes de acostarse, elija una opción saludable, como avena o un plátano con mantequilla de almendras.
Alteración del sueño
Diabetes
Los diabéticos pueden encontrarse en la cerca de bocadillos antes de acostarse. Comer lo incorrecto demasiado cerca de la hora de acostarse puede provocar un alto nivel de azúcar en la sangre por la mañana, pero no comer nada antes de acostarse puede provocar hipoglucemia matutina. Si siente hambre a altas horas de la noche, pero ha comido lo suficiente, coma una merienda baja en calorías y sin azúcar, como gelatina o zanahorias baby. Si solo te sientes "loco", mastica chicle sin azúcar o chupa caramelos duros sin azúcar. Estas opciones le dan sabor para satisfacer sus antojos mientras tienen un impacto insignificante en su cuerpo. Para una opción más satisfactoria, tenga un alimento rico en proteínas, como el requesón, con una fuente de carbohidratos ricos en fibra, como una pequeña porción de galletas integrales. Si come tarde por la noche para evitar tener un nivel bajo de azúcar en la sangre por la mañana, hable con su médico acerca de ajustar su medicamento para evitar esta situación.