Los gases y otros problemas estomacales se encuentran entre los síntomas más comunes que experimentan los bebés. Con frecuencia, los bebés tragan grandes cantidades de aire mientras comen y no tienen el control suficiente sobre sus propios cuerpos para evitar comer en posiciones que causan gases, según el pediatra William Sears. Los bebés menores de 1 año nunca deben recibir leche entera porque puede aumentar los problemas estomacales y es una fuente inadecuada de nutrición.
Descripción general de la nutrición infantil
La Academia Estadounidense de Pediatría recomienda que los bebés sean amamantados exclusivamente durante los primeros 6 meses de vida. Los niños que no son amamantados deben obtener su nutrición de la fórmula. A partir de entonces, los padres pueden introducir alimentos sólidos, pero deben continuar con la lactancia materna o con fórmula durante al menos el primer año de vida. La leche entera no debe introducirse en la dieta de un niño hasta que tenga al menos 1 año porque las calorías en la leche entera son menos completas que las calorías en la leche materna y la fórmula, según Sears en su libro "The Portable Pediatrician".
Leche y gas
Es particularmente probable que la leche entera cause gases en los bebés porque los bebés pueden beberla más rápido que la leche materna o la fórmula. Tragar saliva alienta a los bebés a tragar aire, lo que provoca molestias estomacales, según Sears. Entre los niños que beben mucha leche entera, los gases y otros problemas estomacales pueden ser el resultado de una nutrición inadecuada.
Intolerancia a la lactosa
La lactosa es un azúcar que está naturalmente presente en la leche. La intolerancia ocurre cuando el cuerpo no puede descomponer adecuadamente la lactosa, y la intolerancia a la lactosa es muy común después de la edad de 1 año, según el libro de texto "Biología: vida en la tierra con fisiología". Los bebés mayores que beben leche entera y sufren problemas estomacales pueden ser intolerantes a la lactosa.
Introduciendo Leche
Los padres no deben comenzar a dar leche a sus hijos hasta que estén completamente destetados de la leche materna o la fórmula, según la Academia Estadounidense de Pediatría. La práctica de dar a los niños leche entera es controvertida, porque algunos pediatras han expresado su preocupación de que la leche entera se llene en exceso y contribuya a la epidemia de obesidad, según Sears. Si elige darle a su hijo leche como fuente de calcio y vitamina D, siga las recomendaciones de su pediatra para la ingesta diaria y no le dé leche en un biberón. Beber leche de un biberón aumenta la probabilidad de que un niño desarrolle gases y otros problemas estomacales.