La sudoración excesiva, o hiperhidrosis, es un problema que afecta aproximadamente del 1 al 3 por ciento de la población, según la Facultad de Medicina de Harvard. Si bien la afección puede generalizarse, con mayor frecuencia la sudoración excesiva afecta áreas específicas, como las palmas, los pies, las axilas y el área de la ingle. La hiperhidrosis puede tener repercusiones sociales, haciendo que las interacciones como estrechar las manos sean incómodas y vergonzosas, así como implicaciones prácticas, ya que las manos sudorosas pueden dificultar el trabajo manual. Dado que la sudoración está bajo el control del sistema nervioso simpático, los nutrientes que apoyan la función del sistema nervioso, como las vitaminas B, pueden ayudar a reducir los síntomas de la hiperhidrosis.
Consideraciones
La sudoración excesiva puede ser causada por una variedad de problemas de salud subyacentes, algunos de los cuales pueden ser muy graves o incluso mortales. Entre estos se encuentran infecciones, desequilibrios hormonales, enfermedad de la tiroides, trastornos de ansiedad o algunos tipos de cáncer. Por esta razón, es importante consultar a un profesional médico para un chequeo completo antes de intentar tratar la hiperhidrosis en el hogar.
Hiperhidrosis
La mayoría de los casos de sudoración excesiva se pueden atribuir a la hiperhidrosis, una afección que no es perjudicial para la salud, aunque sin duda puede afectar negativamente a quienes viven con la afección. Si bien no se conoce la causa exacta de la hiperhidrosis, se entiende el mecanismo detrás de la sudoración excesiva. Las glándulas sudoríparas son activadas por el sistema nervioso simpático durante momentos de estrés por medio de una señal química. Los pacientes con hiperhidrosis son particularmente sensibles a estas señales, lo que hace que produzcan mucho más sudor que la persona promedio en condiciones similares. Esta condición parece darse en familias, lo que indica que puede haber un componente genético en la hiperhidrosis.
Vitaminas del complejo B y el sistema nervioso
Una familia de ocho nutrientes esenciales, las vitaminas del complejo B cumplen funciones cruciales en el mantenimiento y la regulación del sistema nervioso. Los bajos niveles de vitaminas del complejo B pueden afectar el sistema de respuesta al estrés del cuerpo, causando hipersensibilidad a situaciones tensas o temerosas. Dado que la sudoración excesiva se desencadena por una reacción exagerada del sistema nervioso simpático al estrés, garantizar un apoyo nutricional adecuado a ese sistema al aumentar la ingesta de alimentos ricos en vitaminas B puede ayudar a reducir o controlar sus síntomas.
Fuentes de vitaminas B
El cuerpo absorbe las vitaminas más eficientemente de las fuentes de alimentos naturales. Los alimentos que son ricos en vitaminas del complejo B incluyen productos de origen animal, como carne, pollo, mariscos, huevos y productos lácteos. Las fuentes vegetales de vitaminas B incluyen granos enteros, vegetales de hojas verdes, frijoles y guisantes. Los suplementos, utilizados junto con una dieta equilibrada, pueden ser una buena opción para aquellos que tienen dificultades para obtener una nutrición suficiente solo con la dieta.