El sistema inmune es responsable de proteger el cuerpo contra la invasión de enfermedades y otros patógenos, incluidos virus, bacterias y parásitos. El sistema inmunitario también está involucrado en la respuesta de curación normal al trauma como protección contra la infección. Aunque el cuerpo es un todo integrado y todos los sistemas trabajan juntos hasta cierto punto, los principales sistemas corporales que trabajan con el sistema inmune son los sistemas linfático, circulatorio, musculoesquelético y digestivo.
Timo
El timo es un órgano especializado y forma parte del sistema inmunitario. El timo se encuentra debajo del esternón y está activo solo en los jóvenes. Puede considerarse como el campo de entrenamiento inmune para el cuerpo en maduración donde las células inmunes aprenden a diferenciar los patógenos de sí mismos.
Sistema linfático
Es a través del sistema linfático que el cuerpo mueve los líquidos fuera de la sangre y el sistema circulatorio. La linfa es la vía principal para la circulación de las células inmunes y las señales inmunes. Contiene miles de ganglios linfáticos donde las células inmunes toman muestras y responden a los patógenos invasores. Las amígdalas, el apéndice y los tejidos linfáticos asociados al intestino (GALT) son similares a los ganglios linfáticos y son órganos más especializados que el cuerpo usa para desarrollar y moderar las respuestas inmunes.
Sistema circulatorio
El sistema circulatorio consiste en los vasos sanguíneos y el corazón y es una vía principal utilizada por las células inmunes para viajar a través del cuerpo.
Sistema musculoesquelético
Es a través del movimiento de los músculos que la linfa se mueve por todo el cuerpo. Esta es una de las principales razones por las que el ejercicio regular es crítico para la función inmune saludable. La médula de los huesos largos y planos del cuerpo es donde las células sanguíneas, incluidas las células inmunes, crecen y maduran antes de ingresar al sistema circulatorio y linfático.
Sistema digestivo
El sistema digestivo es crítico para la función inmune adecuada. El GALT, incluidas las amígdalas y el apéndice, son lugares donde el cuerpo descifra qué sustancias extrañas son alimentos y cuáles son patógenos, lo que ayuda a crear una función inmune normal.
Otros sistemas
Junto con los cuatro sistemas principales, los sistemas respiratorio, nervioso y endocrino están altamente involucrados con la función inmune. Los pulmones están involucrados integralmente con la exposición del sistema inmune a los patógenos y, como el sistema digestivo, tienen grandes cantidades de tejidos inmunes. Los sistemas nervioso y endocrino comparten muchos de los mismos químicos de señalización que el sistema inmune y, junto con el sistema inmune, son esenciales para el equilibrio del cuerpo y la homeostasis (capacidad de mantener el equilibrio interno).
