El sistema endocrino humano es una red de glándulas que segregan hormonas responsables de la regulación de numerosas funciones, como la digestión, la reproducción sexual, el crecimiento y la homeostasis interna. Las glándulas que constituyen el sistema endocrino incluyen los riñones, tiroides, páncreas, hipófisis, suprarrenales, ovarios / testículos y glándulas paratiroides. Un desequilibrio de hormonas causado por un sistema endocrino poco saludable puede producir síntomas que van desde el trastorno de pánico, la desregulación metabólica y la diabetes. Los problemas con la glándula paratiroidea pueden permitir que se acumulen niveles excesivos de calcio en el cuerpo, creando una condición llamada hipercalcemia, mientras que los adenomas o tumores hipofisarios emergen cuando la hipófisis libera demasiada hormona de crecimiento.
Aceites de ácidos grasos Omega 3, 6 y 9
Los aceites de ácidos grasos Omega 3, 6 y 9 se obtienen al comer pescado o al tomar suplementos de aceite de pescado. Mejoran el funcionamiento del sistema endocrino al facilitar el transporte de hormonas por todo el cuerpo. Ciertas células requieren hormonas para mantener su eficiencia en la realización de tareas específicas dentro del cuerpo, como las células reproductivas que regulan las dificultades menstruales y de testosterona. Los ácidos grasos Omega también promueven el equilibrio adecuado de líquidos y el funcionamiento de los riñones, lo que evita la retención de agua y la posible hipertensión resultante. La circulación sanguínea también se beneficia del aceite de pescado, que ayuda a transportar las hormonas a sus destinos.
Frutas y vegetales
Comer un buen equilibrio de frutas y verduras mantiene el cuerpo sano y relativamente libre de enfermedades. Como resultado, el sistema endocrino también se beneficia de estos alimentos, ya que la liberación de la hormona glandular no se ve afectada por trastornos que pueden verse exacerbados por el exceso de grasa, azúcar o sal. Los riñones se ven afectados por la cantidad de toxinas que se ven obligados a filtrar y excretar del cuerpo. Ocasionalmente, no pueden regular las acumulaciones de purina causadas por una dieta de alimentos ricos en purina. La purina excesiva se asocia directamente con el desarrollo de cristales de ácido úrico y artritis gotosa. Además, comer muchas frutas y verduras evita que la tiroides se vuelva lenta, lo que provoca aumento de peso y fatiga crónica.
Ajo y hierbas
El ajo es un potenciador natural del sistema inmunitario y un importante nutriente del sistema endocrino. Masticar uno o dos dientes de ajo al día puede ayudar a mantener niveles normales de azúcar en la sangre, lo que ayuda al páncreas a generar cantidades correctas de insulina. También puede actuar como un anticoagulante y reductor del colesterol. Ciertas hierbas como el ginkgo y el ginseng también pueden mantener el sistema endocrino saludable al regular la liberación de hormonas en todo el cuerpo. El ajo, el ginseng y el ginkgo están disponibles como suplementos.
El estrés y el sistema endocrino
Cuando las personas sufren de estrés crónico, el eje HPA - hipotálamo-hipófisis-suprarrenal - se activa constantemente, produciendo una hormona del estrés llamada cortisol. Mantener niveles excesivos de cortisol puede tener efectos extremadamente perjudiciales para el cuerpo. La enfermedad cardíaca, la hipertensión, el colesterol alto, la insuficiencia renal y la diabetes son trastornos potenciales como resultado de una mayor respuesta al estrés que no se alivia. Demasiado cortisol también contribuye a la osteoporosis prematura, respuestas inflamatorias demasiado rápidas y aumentos de la grasa corporal. Reducir el estrés en tu vida es tan importante como comer sano para tener un sistema endocrino funcional.
