Se estima que entre 30 y 50 millones de niños y adultos en los Estados Unidos tienen una condición de intolerancia alimentaria llamada intolerancia a la lactosa, según el Centro Médico de la Universidad de Maryland. Las personas que son intolerantes a la lactosa no pueden digerir la leche y los productos lácteos adecuadamente debido a la falta de una enzima llamada lactasa. Busque atención médica de su proveedor médico si experimenta síntomas graves de intolerancia a la lactosa, ya que pueden ser signos de otros problemas médicos, como una infección o enfermedad intestinal.
Náuseas o vómitos
En la mayoría de los casos, cuanto más lactasa consuma, más graves serán sus síntomas de intolerancia a la lactosa. Después de comer varias porciones de productos lácteos, puede experimentar náuseas intensas acompañadas de vómitos y pérdida de apetito. Las porciones más grandes de lácteos también tardan más en digerirse, lo que significa que puede experimentar náuseas durante varias horas después de comer leche o lácteos. Póngase en contacto con su proveedor médico si vomita repetidamente durante más de 24 horas. Los episodios recurrentes de vómitos pueden aumentar su riesgo de deshidratación y también pueden ser un signo de otro problema de salud, como intoxicación alimentaria o infección viral.
Flatulencia o hinchazón
El exceso de gas puede acumularse dentro de su tracto intestinal después de consumir leche o productos lácteos. En consecuencia, su abdomen puede aparecer inusualmente hinchado o sus pantalones pueden ajustarse más de lo normal alrededor de su cintura. La hinchazón también puede estar asociada con sensaciones de plenitud o flatulencia repetida, lo que puede ser incómodo y vergonzoso. Además, puede experimentar dolores esporádicos y agudos en el estómago debido al gas abdominal. Si estos síntomas no desaparecen en un día o dos después del inicio, consulte a su médico para una evaluación y atención adicionales.
Movimientos intestinales sueltos
La irritación intestinal causada por los productos alimenticios a base de leche puede provocar deposiciones sueltas y frecuentes. La diarrea generalmente se desarrolla dentro de una o dos horas después del consumo de un producto lácteo en personas con intolerancia a la lactosa. Las deposiciones líquidas también pueden ocurrir junto con dolor de estómago, náuseas, calambres, hinchazón o pérdida de apetito. Es posible que necesite atención médica adicional de su médico si sus síntomas de diarrea continúan por más de uno o dos días. Los episodios prolongados de diarrea pueden aumentar su riesgo de deshidratarse debido a la pérdida excesiva de líquidos de su cuerpo.