El reflujo ácido ocurre cuando el contenido ácido del estómago sube al esófago, el tubo que conecta el estómago y la boca. Los síntomas típicos del reflujo ácido incluyen acidez estomacal o sensación de ardor en el pecho, así como una sensación de que los alimentos vuelven al esófago después de tragar. La piña está en una lista de alimentos que comúnmente se cree que empeoran los síntomas del reflujo, en la creencia de que esta fruta ácida, si se regurgita desde el estómago, puede irritar el esófago y la garganta. Sin embargo, hay una falta de investigación que demuestre que evitar los alimentos ácidos mejora los síntomas, de acuerdo con las pautas de práctica clínica de 2013 del American College of Gastroenterology. En lugar de una restricción general sobre las frutas ácidas como la piña, estas pautas respaldan un enfoque individualizado para evitar los alimentos que empeoran sus síntomas.
Estilo de vida y reflujo ácido
El reflujo ácido se maneja tradicionalmente con medicamentos y cambios en el estilo de vida. Las directrices del American College of Gastroenterology, o ACG, describen las recomendaciones de estilo de vida más respaldadas por la investigación: pérdida de peso si tiene sobrepeso, elevar la cabecera de la cama mientras duerme y evitar las comidas de 2 a 3 horas antes de acostarse. Si bien ACG no recomienda que todas las personas con reflujo ácido eviten los mismos alimentos, estas pautas aclaran que las personas afectadas por el reflujo ácido tendrán niveles variables de tolerancia alimentaria. Entonces, si encuentra que la piña u otros alimentos ácidos como las naranjas y los tomates agravan sus síntomas de reflujo ácido, puede mejorar sus síntomas evitando o limitando estos alimentos.
Beneficios de piña
La piña es una fruta nutritiva utilizada en cocinas de todo el mundo. Es baja en grasas, una buena fuente de fibra y alta en vitamina C. La incorporación de más frutas y verduras es un cambio positivo en la dieta que puede ayudar si está tratando de perder peso, y la pérdida de peso puede mejorar su reflujo ácido. La piña también contiene bromelina, una enzima que ayuda en la digestión. Debido a los beneficios promocionados de la bromelina, la piña se ha considerado durante mucho tiempo un alimento útil para controlar las afecciones digestivas como el reflujo. Sin embargo, hay pocos datos disponibles sobre la bromelina, en las cantidades que se encuentran naturalmente en la piña y su papel en el manejo del reflujo ácido.
Piña y reflujo ácido
Si bien la mayoría de los alimentos se consideran ácidos, definidos por tener un pH inferior a 7, la piña, con un pH de 3.2 a 4.1, es más ácida que muchos otros alimentos. Históricamente, se ha evitado el consumo de alimentos con alto contenido de ácido para ayudar a controlar los síntomas de acidez estomacal. Sin embargo, la investigación aún no ha confirmado los beneficios de este enfoque dietético, de acuerdo con las pautas de práctica clínica 2013 ACG. Si la piña agrava sus síntomas, es posible que deba evitar esta fruta para aliviar los síntomas. Alternativamente, puede evaluar la tolerancia de pequeñas cantidades con las comidas o tratar de combinar esta fruta con un alimento bajo en ácido o neutralizante. Por ejemplo, el Dr. Jonathan Aviv, en su libro "Killing Me Softly From Inside", recomienda que la piña solo se consuma si se mezcla con alimentos neutralizantes, como la leche de soya, almendras o coco. En resumen, es útil hacer su propio trabajo de detective para determinar si la piña mejora o empeora su reflujo ácido.
Manejo del reflujo ácido
Además de controlar las molestias de esta afección, el reflujo ácido puede tener graves consecuencias para la salud. El reflujo ácido no controlado o severo puede conducir a una afección precancerosa que puede contribuir al desarrollo de cáncer de esófago. El manejo efectivo de su reflujo ácido es importante. Además de los cambios en el estilo de vida, que incluyen evitar o limitar los alimentos que empeoran sus síntomas, consulte a su médico si experimenta más que síntomas ocasionales de acidez estomacal. Su médico puede recetar ciertos medicamentos para aliviar el reflujo y proporcionar recomendaciones para ayudarlo a controlar esta afección.
Asesor médico: Jonathan E. Aviv, MD, FACS
