El zinc y el hierro son esenciales para la buena salud. El zinc es esencial para un sistema inmunológico saludable, crecimiento, curación de heridas, reproducción, fertilidad y sentido del gusto y el olfato. Su cuerpo necesita hierro para la formación de glóbulos rojos que transportan oxígeno por todo el cuerpo. Aunque la deficiencia de hierro es la deficiencia nutricional más común, la mayoría de las personas en los Estados Unidos obtienen suficiente zinc de su dieta diaria. La Junta de Alimentos y Nutrición del Instituto de Medicina recomienda 8 mg de hierro y 11 mg de zinc para hombres adultos. Las mujeres requieren 18 mg de hierro y 8 mg de zinc al día.
Causas
Síntomas
La deficiencia de hierro puede conducir a la anemia por deficiencia de hierro, que puede causar fatiga y debilidad porque el cuerpo no tiene suficientes glóbulos rojos. Otros síntomas son pérdida de apetito, latidos cardíacos rápidos, falta de aliento y mareos. En bebés y niños, la deficiencia de hierro puede conducir a problemas de crecimiento y de comportamiento.
Los síntomas de la deficiencia de zinc son pérdida del sentido del gusto, mala cicatrización de heridas, infecciones frecuentes, pérdida de cabello, diarrea y llagas en los ojos. También puede provocar impotencia en los hombres y retraso en el desarrollo sexual en los adolescentes.
Hierro en alimentos
El hierro viene en dos formas: no hemo y hemo. El hierro hemo de origen animal se usa más fácilmente en su cuerpo que el no hemo en fuentes no animales. Las principales fuentes de hierro hemo incluyen aves de corral, huevos, carne de res, hígado y mariscos. También son una buena fuente de proteínas, que necesita para un crecimiento y desarrollo normales. Las fuentes vegetales incluyen frijoles, legumbres y vegetales verdes. Coma frutas secas y nueces para aumentar su consumo de hierro. Muchos alimentos están fortificados con hierro, como arroz, pasta, cereales para el desayuno y pan.
Zinc en los alimentos
Una variedad de alimentos vegetales y animales contienen zinc. La fuente más rica ocurre en las ostras cocidas, que tienen 74 miligramos en una porción de 3 onzas. Pavo, carne de res, cangrejo, pato y pollo también son buenas fuentes. Otras fuentes de zinc incluyen queso, leche, yogurt, frijoles, garbanzos, champiñones y guisantes. Muchos cereales para el desayuno y arroz blanco tienen zinc agregado para ayudar a aumentar su ingesta diaria.