El yodo y el hierro son minerales necesarios para una buena salud. Si vive en los Estados Unidos u otros países desarrollados, las deficiencias de yodo son raras porque la sal de mesa contiene el mineral, al igual que la mayoría de las tierras de cultivo en las que se cultivan alimentos. Las deficiencias de hierro, por otro lado, existen en todo el mundo. Los alimentos y los suplementos pueden ayudar a abordar las brechas nutricionales de cualquiera de los minerales, pero consulte con su médico antes de realizar cambios importantes en su dieta.
Usos de yodo
El yodo ayuda a regular los niveles de hormona tiroidea, previniendo el hipotiroidismo, que puede amenazar el desarrollo adecuado en los niños y causar debilidad, trastornos de la piel y aumento de peso en algunas personas. El bocio, en el cual la tiroides se agranda, resulta de muy poco yodo, aunque el exceso de yodo también puede provocar bocio. Algunos médicos recetan suplementos de yodo a las mujeres que sufren de sensibilidad en los senos en relación con sus ciclos menstruales. El yodo tópico trata heridas, inflamación oral y vaginitis.
Fuentes de yodo
Según UMMC, la persona promedio obtiene la mayor parte de su yodo de la sal de mesa. Los alimentos como las algas pardas, los mariscos y los peces de aguas profundas extraen el mineral del océano. Los panes enriquecidos con yodo, las espinacas, las hojas de nabo, las acelgas, la soja y la calabaza de verano también aportan yodo. Las personas con deficiencias pueden optar por tomar suplementos a base de algas o multivitaminas que contienen yodo. Las farmacias llevan soluciones de yodo líquido para uso tópico en heridas o infecciones.
Usos de hierro
Obtener suficiente hierro ayuda a prevenir la anemia, el trastorno que provoca cansancio extremo y fatiga. Cuando no tiene suficiente hierro en su sistema, no produce suficiente hemoglobina, que es responsable del transporte de oxígeno por todo el cuerpo. Incluso si no tiene anemia, los niveles bajos de hierro pueden interferir con la función del cuerpo, haciéndolo más cansado de lo normal e interfiriendo con los deportes y entrenamientos. La ingesta adecuada de hierro también es crucial para el crecimiento adecuado de los niños y podría calmar la tos de las personas con inhibidores de la ECA.
Fuentes de hierro
Si bien existen alimentos a base de plantas con alto contenido de hierro, contienen hierro no hemo, lo que significa que el cuerpo no los absorbe tan fácilmente como el hierro hemo. Los alimentos de hierro hemo incluyen hígado, ostras, carnes rojas, pescado, pollo y pavo. La espinaca y otras verduras oscuras, nueces, semillas, melaza, granos integrales y frijoles secos encabezan la lista de alimentos de hierro no hem. Los alimentos con vitamina C como las frutas cítricas, las espinacas y los tomates ayudan a su cuerpo a absorber cualquier tipo de hierro de manera más eficiente. Los suplementos de hierro también están disponibles.
Peligros de sobredosis
Demasiada sal de mesa o demasiados suplementos de yodo pueden resultar en niveles peligrosos de nutrientes. Los riesgos del exceso de yodo incluyen afecciones de la tiroides, como la enfermedad de Graves, la enfermedad de Hashimoto y algunas formas de cáncer de tiroides. Los niños pequeños no deben exceder más de 200 mcg diarios; niños de 4 a 8 años, 300 mcg; niños de 9 a 13 años, 600 mcg; adolescentes, 900 mcg y adultos 1, 100 mcg (1.1 mg). Demasiado hierro puede causar dolencias digestivas como acidez estomacal y estreñimiento. En casos más graves, las personas con sobredosis de hierro tienen un riesgo ligeramente mayor de desarrollar enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer. El Instituto Linus Pauling advierte que los niños no deben tomar más de 40 mg de hierro por día, y que los adolescentes y adultos no deben exceder los 45 mg. La muerte puede resultar de dosis extremadamente altas de hierro o yodo. Siempre consulte a un médico para confirmar las deficiencias minerales antes de intentar tratar esas brechas nutricionales usted mismo.