El trampolín es una forma efectiva de ejercicio de bajo impacto que en los últimos años se ha convertido en otro método para mantenerse en forma. Ya sea que trabaje en un trampolín grande en el patio o en un reboteador, saltar quema una cantidad significativa de calorías. El entrenamiento intenso para el sistema cardiovascular y los músculos ayuda a aumentar la tasa metabólica y el tono muscular completo.
Calorías quemadas trampolín
Después de saltar en un trampolín durante 10 minutos, un adulto de 150 libras quema alrededor de 42 calorías. Un entrenamiento de 30 minutos quema 126 calorías. El mismo entrenamiento de 30 minutos realizado por un individuo de 200 libras quema 167 calorías. El número exacto de calorías quemadas durante un entrenamiento depende de la intensidad del rebote y del tipo de saltos realizados. También depende de la altura, el peso y la edad del participante. Cuanto más pesado sea, más calorías quemará mientras rebota.
Rebotando
Los minitrampolines, llamados reboteadores, son lo suficientemente pequeños como para caber en su sala de estar, lo que le permite hacer ejercicio en la comodidad de su hogar. Un entrenamiento de 10 minutos quema 53 calorías para un individuo de 150 libras, mientras que un adulto de 200 libras quema 71 calorías en los mismos 10 minutos. Un entrenamiento de 30 minutos quema 159 y 213 calorías, respectivamente, colocando el rebote en el mismo rango de quema de calorías que una caminata rápida de 30 minutos o una sesión de aeróbicos acuáticos.
Investigación de la NASA
La NASA investigó los beneficios de usar un trampolín para quemar calorías y aumentar la condición física. Descubrieron que 10 minutos rebotando en un trampolín es un entrenamiento cardiovascular más eficiente que más de 30 minutos de carrera. El informe establece que "para niveles similares de frecuencia cardíaca y consumo de oxígeno, la magnitud de los estímulos biomecánicos es mayor al saltar en un trampolín que al correr".