Comidas regulares
Un diabético no puede pasar mucho tiempo sin comida. Si un diabético no come regularmente, su nivel de glucosa en sangre puede caer en picado. Los diabéticos deben comer bocadillos y comidas en un horario debido a que un retraso de tan solo media hora puede reducir el azúcar en la sangre, lo que puede tener resultados catastróficos. Los diabéticos son especialmente propensos a una condición conocida como hipoglucemia, una reacción causada por demasiada insulina en el torrente sanguíneo. Una vez que un diabético toma insulina, es importante comer algo dentro de los 30 minutos antes de que el azúcar en la sangre comience a disminuir. La dosis de insulina que toma también debe coincidir con la cantidad de carbohidratos que consume para mantener los niveles de azúcar en la sangre bajo control.
Hipoglucemia
Cuando un diabético no come suficientes alimentos, pero aún administra insulina, los niveles de glucosa en sangre pueden bajar peligrosamente, provocando hipoglucemia. Los primeros signos de hipoglucemia incluyen mareos, debilidad, dolor de cabeza, hambre o temblores. Si la glucosa en sangre baja demasiado, una persona puede confundirse o incluso perder el conocimiento. En algunos casos, el shock de insulina puede conducir al coma. Aunque todos los diabéticos sufren hipoglucemia a veces, según la Asociación Americana de Diabetes, debe hablar con su médico sobre cuáles deberían ser sus niveles de glucosa en sangre. Si su nivel de azúcar en la sangre cae por debajo de lo recomendado por su médico, es probable que tenga hipoglucemia. Cuando ocurre la hipoglucemia, debe introducir un poco de azúcar en su cuerpo rápidamente. El jugo de frutas, la leche, algunos dulces duros o una cucharada de azúcar o miel pueden ayudar a elevar los niveles de glucosa en la sangre temporalmente.
Dieta Controladora
Los diabéticos a menudo necesitan ajustar las dosis de insulina que toman según la cantidad de gramos de carbohidratos que ingieren en una comida o merienda. Si bien este equilibrio puede ser diferente para una persona que para otra, contar los carbohidratos que consume le permite mantener un nivel saludable de glucosa en sangre. Según el Centro Nacional de Información sobre la Diabetes, qué tan bien una diabética puede controlar su enfermedad depende no solo de lo que come, sino también de cuándo la come. Comer con más frecuencia puede ayudar a mantener constantes los niveles de glucosa en sangre. Planificar tres comidas regulares con bocadillos intermedios puede evitar que el azúcar en la sangre fluctúe. No debe pasar más de cuatro horas sin comer o comer algo. Esto mantiene su cuerpo alimentado durante todo el día.