Eructar es una función corporal normal que ocurre cuando se acumula demasiado aire en el estómago y necesita escapar. Es comúnmente causada por la ingestión de aire mientras come, pero es completamente inofensivo. Sin embargo, puede ser incómodo y molesto, por lo que aprender a reducir la cantidad de aire que tragas puede ser útil.
Callar
Sigue hablando al mínimo mientras comes. Hablar con la boca llena, por ejemplo, puede hacer que tragues el exceso de aire, según Joey Green, autor de "Los remedios de salud mágicos de Joey Green" y más de 50 libros de autoayuda. Tener una conversación acalorada o emocionante también puede hacer que tomes demasiado aire. Guarde la conversación antes o después de la comida y concéntrese en comer para ayudar a reducir las posibilidades de tomar aire en exceso.
Mastica con cuidado
Comer una comida lo más rápido que pueda es otra forma de tomar el exceso de aire mientras come, según el sitio web de PubMed Health. Saborea tu comida en su lugar. Concéntrese en masticar lentamente y disfrutar cada bocado. Esto ayudará a que la comida sea más agradable, pero también te obligará a reducir la velocidad para que no tragues tanto aire. Mastique con la boca cerrada también, porque no podrá tragar tanto aire. (Ver referencia 1 página 46)
Mira lo que comes y bebes
Lo que se pone en la boca puede marcar la diferencia en la cantidad de aire que traga. Los alimentos que contienen aire, como el helado o la crema batida también pueden hacer que tomes un exceso de aire, señala Green. Los refrescos y otras bebidas carbonatadas también contienen mucho aire, lo que puede causar eructos y otros gases después de beberlos.
Consejos Adicionales
No beba de una pajita mientras come, ya que esto puede alentarlo a tragar mucho aire, sugiere Green. Presta atención a lo que acabas de comer si eructas y sientes que tragaste demasiado aire. Diferentes alimentos pueden ser los culpables de diferentes personas y tomar nota de qué alimentos hacen que suceda puede ayudarlo a tomar mejores decisiones alimenticias. Si tiene eructos excesivos que no parecen estar relacionados con sus hábitos alimenticios y de bebida, haga una cita con su médico para determinar si una afección médica subyacente es la culpable.