La intoxicación alimentaria, también conocida como enfermedad transmitida por alimentos, ocurre después de consumir alimentos que han sido contaminados antes o durante su preparación. Según la Clínica Mayo, no todas las personas que consumen alimentos contaminados sufrirán intoxicaciones alimentarias; depende de la probabilidad de que las bacterias sobrevivan en su entorno interno. La intoxicación alimentaria puede comenzar en unas pocas horas o los signos pueden no aparecer durante unos días.
Náuseas y vómitos
Uno de los primeros signos de intoxicación alimentaria son las náuseas, afirma la Clínica Mayo. Esta es una señal directa de que su cuerpo está teniendo dificultades para aceptar los alimentos que consume. Las náuseas pueden provocar vómitos, pero no en todos los casos. Muchos pacientes informan sentirse un poco mejor después de vomitar.
Dificultad para digerir alimentos
Las bacterias que se encuentran en los alimentos contaminados pueden alterar la capacidad de su cuerpo para digerir los alimentos. Esto puede provocar diarrea que tiene una consistencia acuosa o incluso clara. En casos severos, puede notar sangre en la diarrea. Según el Centro Médico de la Universidad de Maryland, algunos pacientes también experimentan dolor abdominal y calambres estomacales. Es importante notificar a su médico de inmediato para que pueda controlar la progresión de sus síntomas. Es igualmente importante que permanezca hidratado, ya que puede estar perdiendo el exceso de líquidos con la diarrea.
Pérdida de apetito
De acuerdo con la Clínica Mayo, la pérdida de apetito es bastante común con la intoxicación alimentaria, especialmente cuando su cuerpo intenta deshacerse de los alimentos contaminados consumidos anteriormente. Sin embargo, es importante comer para mantener su nivel de energía. Elija alimentos suaves como caldos, galletas, arroz o papas, especialmente si tiene náuseas. Evite los alimentos ricos en grasas o picantes, así como los productos lácteos.
Síntomas parecidos a la gripe
Es posible que sienta que tiene gripe en las horas posteriores a la comida contaminada. Además de las náuseas, puede sentirse fatigado o débil. Algunos pacientes desarrollan fiebre y experimentan escalofríos. Controle la progresión de sus síntomas y mantenga actualizado a su médico para proporcionarle información sobre el método de tratamiento más efectivo.
