La cirrosis del hígado ocurre cuando el hígado se cicatriza y no puede funcionar correctamente. Con el tiempo, el flujo de sangre y bilis se bloquea. El hígado ayuda a eliminar y neutralizar las toxinas. También produce proteínas que afectan la coagulación de la sangre, así como vitaminas liposolubles. El abuso de alcohol y la hepatitis C son las causas más comunes de cirrosis en los Estados Unidos. El daño hepático progresa lentamente pero es permanente.
Límite de sodio
Limite de proteínas
La proteína de alta calidad es importante si sus líquidos se están acumulando. La proteína también es necesaria para reparar tus músculos. Sin embargo, demasiada proteína aumenta los niveles de amoníaco y puede causar encefalopatía hepática. Este es un trastorno cerebral causado por la acumulación de toxinas, que puede conducir al coma. Su proveedor de atención médica puede determinar cuánta proteína es adecuada para usted. Puede recomendar solo proteínas vegetales, como la soya, o incluir proteínas animales magras en su plan de dieta. Debe evitar los mariscos crudos, ya que pueden transportar una bacteria llamada Vibrio vulnificus que es peligrosa para las personas con cirrosis.
Limite las grasas
Una dieta alta en grasas puede empeorar la enfermedad hepática y causar hígado graso en personas sin enfermedad hepática. Un hígado graso tiende a cicatrizar a un ritmo más rápido. No más del 30 por ciento de sus calorías deben provenir de grasas. Sin embargo, necesita algo de grasa para ayudar a absorber las vitaminas liposolubles A, D, E y K. Concéntrese en las grasas insaturadas saludables para el corazón, como las que se encuentran en las nueces, el aguacate y el aceite de oliva.
Haga elecciones de estilo de vida saludable
MayoClinic.com recomienda evitar el alcohol, ya sea que su cirrosis haya sido causada o no por el alcohol. El alcohol aumenta el daño a su hígado. Coma muchas frutas y verduras para asegurarse de obtener muchos nutrientes. La desnutrición puede ocurrir con cirrosis. También debes beber mucha agua. Es difícil combatir las infecciones con cirrosis, así que asegúrese de lavarse las manos con frecuencia. También es una buena idea vacunarse contra la gripe, la neumonía y la hepatitis A y B. Muchos medicamentos se filtran a través del hígado, por lo tanto, consulte a su proveedor de atención médica antes de tomar cualquier medicamento. Debe evitar tomar aspirina, naproxeno e ibuprofeno.