El zinc y el selenio son dos oligoelementos necesarios para la salud humana. Cada uno de estos minerales juega un papel importante en el cuerpo, y los niveles insuficientes pueden conducir a una variedad de problemas de salud. Tanto el zinc como el selenio son necesarios para una función inmune saludable, lo que hace que estos nutrientes sean vitales para mantener el cuerpo libre de enfermedades y enfermedades comunes.
Roles de zinc y selenio
El zinc juega un papel en la función inmune, la síntesis de proteínas, la división celular y la cicatrización de heridas. Además, el zinc es importante para el crecimiento y desarrollo normales durante la infancia y el embarazo. El selenio es importante para la reproducción, la función tiroidea, la síntesis de ADN y para proteger el cuerpo del daño oxidativo y la infección.
Mantener una función inmune saludable
El zinc ayuda a mantener saludables los glóbulos blancos para que puedan combatir infecciones y enfermedades. Además, el zinc ha demostrado cierta eficacia en la reducción de los síntomas del resfriado común. Un artículo de 2003 publicado en "Folia Microbiologica" señaló que el zinc y el selenio son importantes para modular la función inmune. El selenio es necesario para la función adecuada de tres tipos diferentes de células del sistema inmunitario conocidas como neutrófilos, macrófagos y las llamadas células asesinas naturales.
Selenio para la salud de la tiroides
La tiroides tiene concentraciones más altas de selenio que cualquier otro órgano del cuerpo. Por lo tanto, el estado de selenio puede ser un indicador importante de enfermedad tiroidea. La tiroides es una glándula pequeña ubicada en la base del cuello que controla la liberación de hormonas que regulan el metabolismo. Las condiciones de la tiroides pueden afectar negativamente los niveles de energía y el peso corporal, así como otros factores relacionados con la función metabólica. Un artículo de 2013 publicado en "Clinical Endocrinology" señaló que la suplementación con selenio puede disminuir los anticuerpos antitiroideos, lo que puede ayudar a mantener la tiroides sana.
Prevenir enfermedades crónicas relacionadas con la edad con zinc
El zinc puede desempeñar papeles importantes en la prevención de la inflamación crónica, según un artículo de 2007 publicado en la "Annals of the New York Academy of Sciences". Los investigadores notaron que la deficiencia de zinc se observa consistentemente en personas mayores con inflamación crónica. El consumo adecuado de zinc puede ayudar a proteger contra una variedad de enfermedades inflamatorias relacionadas con la edad.
Deficiencias minerales
Las deficiencias en zinc o selenio pueden causar una serie de condiciones de salud. Los niveles bajos de selenio se han relacionado con cambios negativos en el estado de ánimo, y las deficiencias pueden ser un factor de riesgo para la enfermedad cardiovascular. La Oficina de Suplementos Dietéticos también señala que las deficiencias de selenio pueden estar relacionadas con la infertilidad masculina y un tipo de osteoartritis. Las deficiencias en zinc pueden causar pérdida de apetito, función inmune deteriorada, retraso del crecimiento y envejecimiento acelerado, entre otras consecuencias para la salud.