Hormigueo, entumecimiento, sensibilidad al tacto y falta de coordinación son signos reveladores de que puede tener daños en su sistema nervioso periférico, una condición conocida como neuropatía periférica. El yoga es una de las muchas terapias que pueden ayudar a fortalecer las vías de comunicación entre los nervios y el cerebro, aliviando los síntomas y desalentando la progresión.
Una cartilla de neuropatía periférica
Su sistema nervioso periférico consta de sensores que transmiten información entre su cerebro y la médula espinal y el resto de su cuerpo, incluida la piel, los dedos, los brazos y las piernas. Se puede desarrollar debilidad muscular, sensibilidad anormal a los cambios de temperatura y, con el tiempo, parálisis, problemas de digestión y función endocrina alterada.
Las causas de la neuropatía periférica son variadas. Puede experimentarlo como resultado de un accidente traumático, como una caída o un accidente automovilístico; estrés repetitivo, como es el caso del síndrome del túnel carpiano; o de trastornos metabólicos y endocrinos, que incluyen diabetes. El cáncer, ciertas infecciones, trastornos autoinmunes, nueromas y trastornos de los vasos pequeños también pueden ser los culpables.
Independientemente de la causa de su compromiso del sistema nervioso, desea aumentar la comunicación entre la columna vertebral, el cerebro y los nervios en todo el cuerpo. Si bien su médico debe ayudarlo a tratar la afección subyacente, el yoga puede ayudarlo a controlar los síntomas.
El potencial del yoga
La investigación ha revelado el potencial para el tratamiento de la neuropatía con la práctica del yoga. Un número de 2002 del Indian Journal of Physiology and Pharmacology informó un estudio que muestra que, entre 20 personas con diabetes tipo 2, el yoga realizó de 30 a 40 minutos diarios durante 40 días y mejoró la función nerviosa y el control glucémico (los niveles glucémicos altos agravan la neuropatía).
Una revisión de 2012 de la investigación de los efectos del yoga sobre los trastornos del sistema nervioso publicada en Annals of Indian Academy of Neurology confirmó que el yoga es una terapia integradora y complementaria válida para afecciones como la neuropatía periférica. Recuerde que el yoga debe combinarse con otros tratamientos; No debería ser tu única línea de ataque. Las modificaciones en el estilo de vida, las intervenciones médicas y la estimulación nerviosa eléctrica también son estrategias importantes.
Poses para practicar
La gravedad de su condición determina el tipo y la intensidad del yoga que practicará para tratar la neuropatía periférica. Los casos menos avanzados pueden funcionar bien con una clase de estilo Hatha que involucra posturas sentadas y de pie, incluida la postura del triángulo, la postura del camello y el arco.
La neuropatía más avanzada puede requerir una práctica más suave, pero aún puede beneficiarse de la meditación, giros suaves y respaldos. Usa un collarín o un bloque como apoyo en la postura del puente o en el héroe reclinado, por ejemplo.
Todas estas posturas son particularmente beneficiosas para abrir la parte frontal de su cuerpo, aumentar la oxigenación de los tejidos y mejorar la circulación sanguínea a los nervios.
Los beneficios de la relajación
Una práctica regular de yoga te enseña a manejar el estrés de vivir con neuropatía periférica. La meditación y la respiración profunda lo ayudan a aprender cómo vivir a través de la distracción, incluso las físicas dolorosas, como puede suceder con los trastornos nerviosos. Cuando aprende a respirar y a estar presente en el tapete, puede cambiar más fácilmente a un patrón de aceptación fuera del tapete. La neuropatía periférica no se puede curar, solo contener, por lo que la aceptación es esencial.
La conexión cuerpo-mente adquirida a través del yoga también te ayuda a beneficiarte cuando tratas de controlar los síntomas de la neuropatía periférica. Tendrás una mejor idea de cómo reaccionas ante poses específicas y cuáles son útiles y cuáles son agravantes. Esto se traduce en el tapete, por lo que tiene una idea de qué actividades puede impulsar, qué puede desencadenar un episodio y cómo puede controlar los síntomas de la neuropatía cuando ocurre.