Las patadas de tijera son un ejercicio abdominal efectivo. Es particularmente útil porque puede modificarse para adaptarse a un deportista principiante o experto y no requiere ningún equipo adicional. Antes de intentar cualquier ejercicio nuevo, es útil comprender qué músculos se están utilizando y cómo realizar el ejercicio adecuadamente para evitar lesiones.
Músculos primarios
Los músculos primarios involucrados en las patadas de tijera son los flexores de la cadera y el abdomen transverso, el músculo más profundo del estómago. Los flexores de la cadera trabajan para levantar y sostener las piernas ligeramente del piso durante el ejercicio. El transverso abdominal ayuda a mantener su estabilidad, postura y equilibrio. También tira de la pared abdominal hacia adentro y, con la ayuda del recto abdominal y los oblicuos, mantiene el abdomen plano. Debido a que el abdomen transverso está involucrado en tantos movimientos diarios, es beneficioso fortalecer el músculo a través del ejercicio.
Otros músculos
Otros músculos involucrados en patadas de tijera incluyen el recto abdominal y los oblicuos. El músculo recto abdominal se extiende verticalmente frente al torso y es más superficial que el transverso abdominal. Los oblicuos son dos músculos diferentes conocidos como oblicuos internos y oblicuos externos, y están involucrados en la rotación y la flexión lateral de la columna vertebral, así como en el movimiento y la estabilidad.
Técnica adecuada
Realizar patadas de tijera con una técnica inadecuada puede ejercer presión sobre la espalda baja. Comience acostado sobre una estera boca arriba. Antes de levantar las piernas del piso, enganche su núcleo imaginando que está jalando su ombligo hacia su columna vertebral y presionando su espalda baja sobre la colchoneta. Mantenga la espalda presionada sobre el tapete durante todo el ejercicio.
Consejos y consideraciones
Otros ejercicios que se dirigen a su abdomen transversal incluyen crujidos inversos, rotaciones de tronco sentado y tablones. También es importante considerar el equilibrio muscular: si está trabajando los abdominales, asegúrese de fortalecer también los músculos de la espalda. Como con cualquier programa de entrenamiento de fuerza, el descanso es esencial. El Colegio Americano de Medicina Deportiva le aconseja que espere 48 horas entre sesiones de entrenamiento de fuerza, para dar a sus músculos el tiempo que necesitan para repararse y crecer.