Algunas personas parecen tener estrías a la menor señal de aumento de peso, mientras que otras tienen una piel resistente que resiste todo estiramiento. Factores más allá de su control, como la genética, la edad y el embarazo, pueden hacer que su piel sea más propensa a desarrollar estrías, pero puede controlar otros factores para ayudar a prevenir estas líneas.
Aumento de peso
Condición de piel
La piel seca es menos elástica que la piel sana y bien hidratada. Si su piel está hidratada, es menos probable que desarrolle estrías, ya que su piel puede adaptarse a los cambios en su peso y forma corporal con mayor facilidad. Si eres propenso a las estrías, asegúrate de usar un producto humectante después de bañarte todos los días para ayudar a sellar la humedad. Además, coma una dieta nutritiva, con muchos antioxidantes como la vitamina A y C para ayudar a proteger su piel.
Años
A medida que envejece, su piel pierde colágeno y otros tejidos que ayudan a mantenerla elástica y capaz de mantener su forma, según la Academia Estadounidense de Dermatología. Esto significa que su piel se estira mejor, lo que hace que sea menos probable que desarrolle estrías. Sin embargo, esto significa que la piel joven, con más colágeno, grasa y tejidos de soporte, es más propensa a las estrías. Afortunadamente, la piel joven curará las estrías más rápidamente, desvaneciéndolas de las marcas púrpura rojizas a líneas casi invisibles más claras.
Factores genéticos
Su genética, particularmente el color de la piel y los antecedentes familiares, influyen en si su piel es propensa a las estrías. Si bien las razones aún no están claras, las mujeres con tez más oscura tienen más probabilidades de desarrollar estrías que las mujeres con tez más clara. Además, si su madre era propensa a las estrías, es más probable que las tenga. Más de la mitad de las mujeres que reportan estrías también tenían una madre que tenía estrías, según la Asociación Americana del Embarazo.