Caminar sobre el agua ofrece varios beneficios sobre dar un paseo típico por tierra. El agua proporciona resistencia, haciendo que tus músculos trabajen más para avanzar. Al mismo tiempo, proporciona flotabilidad, lo que ayuda a reducir la tensión en las articulaciones. Cambiar su rutina de caminar en el agua lo mantiene interesante mientras le permite trabajar diferentes músculos como parte del ejercicio.
La forma es clave
La forma adecuada lo ayuda a aprovechar al máximo su entrenamiento de caminata en el agua, independientemente del ejercicio que más le convenga. Al igual que en tierra, mantenga la espalda recta y los hombros levantados. Inclinarse hacia adelante engaña un poco la resistencia, pero mantener la espalda recta requiere que los músculos abdominales trabajen un poco más contra la presión del agua. Pise como lo haría en tierra también: su talón baja primero, luego gírelo hacia su dedo del pie. La flotabilidad del agua puede hacer que esto sea un desafío, que es lo que desea de su tiempo de ejercicio. Balancear los brazos en aguas poco profundas o profundas ayuda a elevar el componente cardiovascular del entrenamiento.
Cumplir con lo básico
Caminar en el agua básica es muy parecido a caminar en tierra, pero debes decidir a qué profundidad te sientes cómodo haciendo ejercicio. El agua debe ser al menos hasta la cintura para que los movimientos completos de tus piernas empujen contra la resistencia del agua. Cuanto más profundo vayas, más resistencia encontrarás, incluyendo balancear los brazos bajo el agua. Tome pasos largos y decididos tan rápido como se sienta cómodo. Para comenzar, dispare durante aproximadamente la mitad de su tiempo normal de caminata en tierra, como 15 minutos si normalmente camina 30 minutos en tierra. Aumente su tiempo de caminata en el agua gradualmente.
Sacudiendo la rutina
La caminata básica no es la única forma de moverse por la piscina. Intente caminar hacia atrás y hacia los lados, lo que trabaja más adentro y afuera de los muslos que cuando se mueve hacia adelante o hacia atrás. Levante las rodillas para comprometer más sus abdominales. En el agua que está a la altura de la cintura, haz estocadas para caminar donde bajas tu cuerpo con la rodilla delantera doblada a 90 grados y la pierna trasera recta.
Haciéndolo más difícil
Aunque el agua más profunda aumenta automáticamente la resistencia, agregar guantes de agua también ayuda. Estos guantes suelen estar enredados entre los dedos para que sea más difícil empujar las manos a través del agua. Balancee los brazos con las palmas hacia arriba para agregar más ejercicios de la parte superior del cuerpo a su caminata acuática, o sosténgalos hacia los lados sin balancearlos para crear resistencia. Esto hace que caminar por el agua sea un desafío.