Nadar después de una amigdalectomía

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Anonim

Una amigdalectomía no es divertida en el mejor de los casos, pero al menos hace que los niños tengan una semana libre más o menos fuera de la escuela. La mala noticia es que si a esos niños les encanta nadar, tendrán que pasar ese tiempo libre en tierra firme. El área afectada necesita tiempo adicional para sanar adecuadamente, por lo que nadar de inmediato no es una opción.

Niña nadando en la piscina Crédito: Miroslav Ferkuniak / iStock / Getty Images

Tiempo de costra

Amígdalas es un término general que se refiere a varias partes diferentes de la boca. Se llama amigdalectomía cuando se extirpan las amígdalas palatinas. Estos tejidos a cada lado de la parte superior de la garganta están sujetos a infecciones repetidas, por lo que deben cortarse. El área tiene que cubrirse y sanar antes de que el niño pueda regresar a sus actividades normales, como nadar. La costra tarda de cinco a 10 días en caerse.

Evitar la natación

Si no está seguro de cuánto tiempo evitará nadar después de la cirugía, pregunte al equipo de atención médica que realiza la operación. Las opiniones profesionales varían. Por ejemplo, el Hospital de Niños de Pittsburgh dice que los niños pueden volver a nadar después de dos o tres semanas, y Johns Hopkins dice que toda actividad vigorosa debe evitarse durante dos semanas.

Puede haber sangre

Los médicos no quieren que los pacientes en recuperación tomen ninguna medida que pueda alentar el sangrado en el área afectada. La natación podría hacer eso, y es por eso que la mayoría quiere evitar tal acción durante al menos dos semanas. El sangrado es una gran preocupación con la recuperación de la amigdalectomía, incluso si el paciente nunca entra en una piscina. Algunos médicos piden a los padres que despierten al niño la primera noche para verificar si hay signos de sangre.

Qué hacer

Los padres solo deben permitir que sus hijos jueguen en silencio durante el tiempo de recuperación. La natación y otros deportes con mucho movimiento también podrían causar problemas que podrían dificultar el proceso de la costra. Existe la posibilidad de que el niño no se sienta con ganas de nadar de todos modos. Entre las muchas posibilidades comunes posteriores a la cirugía se encuentran náuseas, fiebre y dolor en la cabeza, el cuello y las orejas.

¿Es esto una emergencia?

Si experimenta síntomas médicos graves, busque tratamiento de emergencia de inmediato.

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