La mala absorción es el término médico para no digerir y absorber los alimentos adecuadamente. Muchos tipos de afecciones médicas pueden provocar malabsorción, que generalmente sale a la luz cuando experimenta signos y síntomas. Su sistema digestivo es el sitio primario para muchos de los signos y síntomas de malabsorción. Otros sistemas de órganos pueden estar involucrados debido a deficiencias nutricionales que pueden desarrollarse si tiene un problema digestivo grave.
Diarrea
La comida no digerida en su tracto digestivo generalmente causa diarrea. Una alta concentración de nutrientes no absorbidos en los intestinos provoca una afluencia de agua, lo que conduce a la diarrea. Puede experimentar calambres y dolor abdominal asociado con la diarrea. Si tiene dificultades para digerir las grasas, puede notar que las heces flotan en el agua del inodoro y tienen un aspecto grasiento. La diarrea crónica es el síntoma más común de malabsorción.
Hinchazón y gas
La mayor parte de la digestión y absorción de alimentos ocurre en su intestino delgado. En circunstancias normales, el material fecal que llega a su intestino grueso o colon tiene una baja concentración de alimentos no digeridos. Con la malabsorción, sin embargo, grandes cantidades de carbohidratos, grasas y / o proteínas no digeridas son transportadas a su colon. Las bacterias normales allí se alimentan de los nutrientes no digeridos, liberando gases que causan hinchazón abdominal y un mayor paso de gases desde el recto. La sobreabundancia de agua en sus intestinos se suma a la hinchazón que experimenta con la malabsorción.
Pérdida de peso
La pérdida de peso involuntaria es un síntoma común de los síndromes de malabsorción que interfieren significativamente con su capacidad para digerir carbohidratos, grasas, proteínas o una combinación de estos nutrientes principales. Es posible que esté comiendo una cantidad suficiente de calorías, pero los alimentos que pasan a través de su tracto gastrointestinal sin digerir no le brindan el beneficio de esas calorías. Un problema digestivo aislado, como la dificultad para digerir el azúcar de la leche, generalmente no causa una pérdida de peso significativa. Es más probable que experimente una pérdida de peso involuntaria con problemas digestivos que afectan múltiples nutrientes, como la enfermedad celíaca, la pancreatitis y la enfermedad de Crohn.
Crecimiento deficiente
Entre los niños, los problemas digestivos graves suelen conducir a un crecimiento deficiente y al incumplimiento de los hitos físicos esperados. Calorías y proteínas insuficientes son factores importantes en el retraso del crecimiento de un niño. Las deficiencias de vitaminas y minerales relacionadas con la mala absorción también contribuyen a un crecimiento deficiente. Si su hijo no está aumentando de peso como se esperaba, hable con su médico.
Falta de energía
Puede experimentar falta de energía y fatiga fácil si tiene un problema digestivo que conduce a una mala absorción significativa. Las calorías insuficientes para satisfacer sus demandas de energía pueden ser complicadas deficiencias de vitaminas y minerales. Varias vitaminas ayudan en la producción metabólica de energía, que se ralentiza cuando tiene una deficiencia. Los problemas digestivos que conducen a deficiencias de vitamina B-12, ácido fólico y hierro causan anemia, lo que contribuye aún más a su falta de energía.