El magnesio ayuda a su cuerpo a mantener sus huesos fuertes, su azúcar en la sangre y su presión arterial a niveles normales, y su sistema inmunológico funciona correctamente. Ayuda con la creación de proteínas y participa en la función cardíaca, nerviosa y muscular. El consumo de niveles suficientes de magnesio también puede ayudar a prevenir problemas hepáticos.
Problemas de magnesio y hígado
Las personas que padecen el síndrome del hígado graso, ya sea inducido por el alcohol o no, y las personas con cirrosis hepática a menudo tienen niveles bajos de magnesio, según estudios publicados en 1972 en "QJM" y en 2006 en "" Bratislavske Lekarske Listy ". El magnesio suplementario puede ayudar a evitar que estas afecciones hepáticas empeoren.
Deficiencia de magnesio
Los alcohólicos, los ancianos, las personas con síndromes de malabsorción y las personas con diabetes mal controlada tienen más probabilidades de sufrir deficiencia de magnesio. Los síntomas de deficiencia de magnesio incluyen niveles bajos de calcio, niveles bajos de potasio, retención de sodio, temblores, fatiga, pérdida de apetito, entumecimiento, hormigueo, debilidad, espasmos musculares, vómitos, náuseas, ritmos cardíacos anormales y cambios de personalidad.
Suplementos de magnesio
Consideración
Los suplementos de magnesio, aparte de la pequeña cantidad de magnesio que se encuentra en las multivitaminas, no se recomiendan para todos. La mayoría de las personas obtienen mucho magnesio a través de su dieta. Si le preocupan sus niveles de magnesio, intente consumir más alimentos ricos en magnesio, como pescado, nueces, soya, espinacas, granos integrales, papas y frijoles. Solo tome suplementos de magnesio siguiendo el consejo de su médico, ya que estos pueden tener efectos secundarios e interactuar con ciertos medicamentos.