Las prostaglandinas juegan un papel importante en su cuerpo. Estos químicos naturales activan su sistema inmunológico en respuesta al estrés. Dicha activación generalmente desencadena inflamación no deseada y fiebre. Puede mejorar su salud al detener esta respuesta.
8 alimentos que estimulan tu sistema inmunológico
Cambia tu dieta
Un artículo de enero de 2018 en Review of Optometry describió las prostaglandinas en la salud y la enfermedad. El autor señaló que estos químicos inmunes pueden causar inflamación en cualquier parte del cuerpo. Tal inflamación a menudo limita su libertad de movimiento, por lo que es posible que desee disminuir sus prostaglandinas.
Comer ciertos alimentos puede ayudarlo a reducir sus niveles de prostaglandinas. Ese cambio puede ayudarlo a sentirse más saludable y en forma. Solo asegúrese de hablar con un médico antes de autodiagnosticarse una afección o modificar su dieta. El estilo de vida y los cambios en la dieta pueden tener consecuencias inesperadas.
Usar miel
Los griegos curaron las heridas con miel hace miles de años, y los investigadores modernos han documentado las propiedades antisépticas de este producto natural. Un informe de enero de 2018 en Oxidative Medicine and Cellular Longevity descubrió que la miel gana su poder curativo al reducir varios tipos de prostaglandinas inflamatorias. Especulaban que una disminución inducida por la miel en los niveles de prostaglandina puede restaurar su sistema inmunológico.
Comer hongos
La gente ha usado hongos como alimento y medicina durante siglos. Los científicos continúan verificando las propiedades curativas de estos hongos comestibles, creyendo que las propiedades antioxidantes de los hongos median estos efectos.
Los hongos presentan varios químicos conocidos por eliminar los radicales libres, según un artículo de marzo de 2018 en Food Chemistry. Estas sustancias también disminuyen las prostaglandinas. Por ejemplo, los extractos tomados del hongo lingzhi disminuyeron la producción de prostaglandinas. El hongo bolete de la bahía tuvo un efecto similar. Los autores del artículo de marzo de 2018 consideran que los hongos son un superalimento y sugieren que sean parte de nuestra dieta diaria.
Espolvorear jengibre
Los curanderos ayurvédicos han usado el jengibre como panacea durante milenios. Esta planta, ahora conocida como especia, no tiene efectos indeseables, y la Administración de Drogas y Alimentos la considera segura. Un informe de 2016 en Journal of Applied Pharmaceutical Science analizó la capacidad de la especia para disminuir la inflamación relacionada con el ejercicio.
Los participantes tomaron 3 gramos de jengibre cada día durante 10 semanas de ejercicio intenso. En comparación con el valor inicial, las mujeres que recibieron jengibre tenían niveles más bajos de biomarcadores inflamatorios al final del estudio. La supresión de la prostaglandina causada por los químicos activos en el jengibre - gingeroles y shogaoles - medió estos efectos.
Comer sopa
Los científicos han establecido repetidamente los beneficios para la salud de la dieta mediterránea. Los componentes individuales de esa dieta pueden darle vitaminas y disminuir sus prostaglandinas, según una revisión de 2018 en la revista Redox Biology. Por ejemplo, la sopa de verduras mediterránea, el gazpacho, puede desempeñar un papel útil en su dieta. Comer gazpacho cada día durante dos semanas aumentó los niveles de vitamina C y disminuyó los niveles de prostaglandina E2 en mujeres y hombres sanos.