La espinaca es un vegetal de hoja verde rico en vitaminas, minerales, fibra dietética, antioxidantes y fitoquímicos. Uno de los muchos nutrientes que se encuentran en las espinacas es el potasio, un mineral esencial y electrolito. El funcionamiento normal del cuerpo humano depende de la estricta regulación del potasio dentro y fuera de las células. Comer espinacas lo ayudará a satisfacer sus necesidades diarias de potasio. Comido crudo o cocido, la espinaca tiene un gran aporte nutricional.
Función de potasio
El potasio se encuentra en todas las células de su cuerpo. Como electrolito, el potasio tiene la capacidad de disociarse en iones y conducir electricidad. Es vital para la contracción del músculo esquelético y liso y juega un papel clave en la función normal del músculo, el corazón y el aparato digestivo. Funciona estrechamente con el sodio para controlar el equilibrio de electrolitos y líquidos de su cuerpo. El potasio también ayuda a disminuir la presión arterial y a reducir el riesgo de accidente cerebrovascular.
Subsidio dietético
La Junta de Alimentos y Nutrición del Instituto de Medicina estableció niveles adecuados de ingesta de potasio en función de la cantidad necesaria para reducir la presión arterial, reducir la sensibilidad a la sal y minimizar el riesgo de cálculos renales. Los bebés de hasta 6 meses requieren 400 miligramos, mientras que los bebés de 7 a 12 meses necesitan 700 miligramos de potasio al día. Los niños mayores necesitan entre 3.000 y 4.500 miligramos diarios, según la edad. Los adolescentes y los adultos requieren un poco más por día, al menos 4, 700 miligramos. Las fuentes más ricas de potasio son las frutas y verduras, por lo tanto, apunte a cinco porciones de productos frescos al día. Las legumbres, el pescado, la carne y algunos productos lácteos también contribuyen a la ingesta diaria de potasio.
Espinacas
Si bien es importante comer diariamente una variedad de frutas y verduras coloridas, la espinaca verde oscura es especialmente saludable. La clorofila es el pigmento que le da a la espinaca su color profundo, y ayuda a mantener la visión, huesos y dientes fuertes, y reduce el riesgo de ciertos tipos de cáncer. La espinaca consiste en hojas pequeñas y medianas de color verde brillante, gruesas, de forma ovalada, con tallos verdes. Puedes comer tanto las hojas como los tallos. La col rizada, la hoja plana y la semi-col rizada son los tipos más comunes de espinacas, cada una con un sabor, textura y uso común distintos.
Potasio en Espinacas
La espinaca es una buena fuente de fibra dietética y muchas vitaminas y minerales, especialmente vitamina K, ácido fólico, manganeso, hierro y magnesio. La pigmentación verde de las espinacas indica que es una rica fuente de antioxidantes como el betacaroteno, una forma de vitamina A. La espinaca también está llena de potasio. En promedio, 1 taza de hojas de espinacas crudas contienen 167 miligramos, mientras que 1 taza de espinacas cocidas contiene 840 miligramos de potasio.
Espinacas crudas vs. cocidas
La mayoría de las verduras pierden su valor nutricional cuando se cocinan y se deben comer crudas siempre que sea posible. Sin embargo, este no es el caso con las espinacas. Cocinar algunas verduras en realidad puede aumentar su contenido de antioxidantes y minerales. El calentamiento hace que las paredes celulares de los vegetales se descompongan más fácilmente y liberen vitaminas y minerales como el potasio. Además, la espinaca contiene un compuesto conocido como ácido oxálico que se une con calcio y otros minerales, reduciendo su absorción. Cocinar libera minerales, aumentando la cantidad de potasio, calcio y magnesio disponible para su cuerpo. Es por eso que las espinacas cocidas contienen más potasio disponible.