La tiroides, una glándula ubicada en la parte frontal del cuello, excreta hormonas que regulan el metabolismo. Si tiene una tiroides poco activa, médicamente conocida como hipotiroidismo, su cuerpo no excreta suficientes hormonas. Si bien la medicación es el modo principal de tratamiento para el hipotiroidismo, la dieta también juega un papel importante. De hecho, ciertos alimentos, como la soja no fermentada, las verduras crucíferas y el mijo, por ejemplo, pueden no ser tan buenos para la tiroides. Consulte a su médico antes de realizar cambios en su dieta.
Alimentos de soya no fermentados
La leche de soya, el tofu, las hamburguesas de soya y el aceite de soya son ejemplos de alimentos de soya no fermentados. Estos alimentos de soya son ricos en isoflavonas, que son compuestos vegetales que tienen actividad similar al estrógeno. Las isoflavonas de soja se consideran bociógenos o agentes que interfieren con la función tiroidea. Si tiene hipotiroidismo, es posible que deba evitar o limitar estos alimentos en su dieta. Su médico puede ayudarlo a determinar la cantidad de soya no fermentada que puede tolerar. Sin embargo, los alimentos de soya fermentados, como el tempeh, la salsa de soya y el miso, no contienen las isoflavonas y pueden incluirse en su dieta.
Vegetales crucíferos
Las verduras crucíferas crudas (brócoli, coles de Bruselas, repollo y coliflor) también contienen bociógenos. Comer demasiados vegetales crucíferos ha causado hipotiroidismo en los animales, según el Instituto Linus Pauling. Sin embargo, los estudios en humanos no han producido los mismos resultados. Cocinar vegetales crucíferos desnaturaliza los bociógenos, haciéndolos más seguros para comer.
Sustitución de mijo
El mijo es un grano nutritivo y sin gluten que se usa para hacer cereales y pilaf, y a menudo se agrega a sopas y guisos. También es el grano utilizado para hacer el pan plano indio roti. Sin embargo, el mijo puede suprimir la función tiroidea, según la dietista Cheryl Harris en el sitio web Today's Dietitian. Ella recomienda que reemplace el mijo en su dieta con otros granos. Las alternativas saludables de granos incluyen arroz integral, quinua o avena.