El aceite de pescado es una fuente animal de grasas poliinsaturadas omega-3 DHA y EPA. Se encuentra más abundantemente en pescados grasos como el salmón y el atún, o como suplemento de píldoras o aceites. El aceite de pescado es ampliamente conocido y utilizado en el tratamiento de enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, los estudios han revelado que también puede usarse para muchas otras funciones cerebrales, incluido el manejo de los trastornos del estado de ánimo y la depresión.
Papel Omega-3 en el cuerpo
Los omega-3 son grasas esenciales. El cuerpo no puede producirlos por sí solo. Las fuentes alimenticias de Omega-3 incluyen pescado graso como el salmón, el atún y la caballa; nueces y aceite de linaza y canola. Los ácidos omega-3 también están ampliamente disponibles en forma de suplemento, ya sea como aceite de pescado o aceite de linaza. El Instituto Nacional de Salud identifica una función principal de omega-3 como ayudar a reducir el dolor y la hinchazón y mejorar las funciones cerebrales y nerviosas.
Aceite de pescado y depresión: la evidencia
Existe un debate entre los investigadores de que el aceite de pescado es eficaz en el tratamiento de la depresión. El Dr. Daniel Hall-Flavin, de la Clínica Mayo, cree que el aceite de pescado puede usarse para tratar los síntomas de depresión y ansiedad. En una edición de 2009 de "Neurosignals", un estudio sugirió que el aceite de pescado puede tratar los síntomas de depresión junto con medicamentos. Una revisión en "Edad y Nutrición" establece que existe una relación inversa entre la incidencia de depresión estacional y la cantidad de Omega-3 presente en el plasma sanguíneo de un individuo. Sin embargo, el Dr. Michael Maes, en "Neuroendocrinology Letters", concluye que el DHA Omega-3 en el aceite de pescado puede interferir con la función de los medicamentos antidepresivos regulares, pero EPA Omega-3 no interfiere con la función de los antidepresivos.
Dosis apropiada
La dosis adecuada para tratar la depresión y la ansiedad no es concluyente en la investigación. Según el Instituto Nacional de Salud, la dosis de aceite de pescado cuando se trata la depresión es de 9.3 go 9.300 mg por día. Esto va mucho más allá de la dosis recomendada de 1 a 4 g para la enfermedad cardiovascular. Un estudio encontró que las dosis entre 200 mg y 9 g son efectivas para el tratamiento. Sin embargo, el Dr. Hall-Flavin recomienda solo de 100 a 300 mg diarios para el tratamiento de la depresión y la ansiedad, aunque afirmó que se necesita más investigación para determinar las dosis ideales.
Interacción de medicación
Las altas dosis de ácidos grasos Omega-3 pueden tener riesgos potenciales e interacciones con medicamentos. No comience un régimen de aceite de pescado sin consultar primero a un médico. Según los NIH, existe el riesgo de sangrado por consumir más de 3 g de Omega-3 por día. El aceite de pescado también puede aumentar los efectos de los medicamentos para la presión arterial alta y disminuir la presión arterial a niveles severos. Los anticonceptivos y los medicamentos Orlistat para bajar de peso pueden inhibir la absorción de aceite de pescado.