Esforzarse al hacer ejercicio puede ayudarlo a ver los resultados que desea. Pero a veces, esforzarte demasiado, no mantenerte hidratado o hacer ejercicio en el calor puede tener repercusiones peligrosas, especialmente si tu entrenamiento te hace sentir mareado, con náuseas o desmayo.
Al comprender sus factores de riesgo para sentirse mareado después del ejercicio, puede evitar que la sensación arruine una buena sesión en el gimnasio. Sin embargo, si los síntomas persisten, consulte a su médico.
Mareos después del entrenamiento
Sentirse mareado después de un entrenamiento puede tener una variedad de causas. Una de las causas comunes de sentirse débil después de un entrenamiento es simplemente esforzarse demasiado. Empujar demasiado tu cuerpo puede hacer que tu corazón trabaje demasiado y no reciba suficiente sangre en tu cabeza.
También puede sentirse mareado si no ha estado hidratando su cuerpo durante el ejercicio o si ha estado haciendo ejercicio en el calor. Como parte de la respuesta de enfriamiento, los vasos sanguíneos de todo el cuerpo se dilatan. La dilatación de los vasos sanguíneos en el cerebro puede provocar mareos.
Los mareos también pueden ser el resultado de hacer ejercicio en una máquina de movimiento continuo, como una máquina elíptica o una cinta de correr. Al bajarse de la máquina, puede experimentar vértigo o la sensación de que todavía está en movimiento cuando se detiene.
Factores de riesgo de mareos
Cuando consulte con su profesional de la salud acerca de sus mareos después del entrenamiento, probablemente evaluará sus factores de riesgo para determinar la causa de sus mareos. Tener sobrepeso o estar fuera de forma puede provocar mareos, al igual que hacer ejercicio en ambientes cálidos y deshidratarse.
El mareo también puede ser causado por una afección llamada vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB). Este trastorno vestibular generalmente aparece repentinamente y es causado por el movimiento de cristales en su oído interno. El BPPV puede ser tratado por fisioterapeutas especialmente capacitados.
Tratamientos para mareos
Consejos para la prevención de mareos
La prevención de un mareo puede ayudarlo a evitar un entrenamiento que se ve interrumpido por mareos o una recuperación más larga de lo necesario. Al permitir que su cuerpo se caliente adecuadamente al ejercicio extenuante, le da a su corazón tiempo para adaptarse al cambio en la necesidad de sangre a sus músculos.
La hidratación adecuada, que equivale a 7 a 10 onzas por cada 10 a 20 minutos de ejercicio, y hacer ejercicio en el interior cuando está a más de 90 grados Fahrenheit, puede ayudarlo a evitar mareos por el calor y la deshidratación.
Finalmente, si constantemente tiene problemas con BPPV, hable con su médico sobre ejercicios que pueden ayudarlo a mejorar su equilibrio y haga ejercicio con un amigo que pueda ayudarlo en caso de un mareo.