Un baño de pies se vuelve especialmente relajante en el embarazo, cuando el exceso de líquido se acumula en los tejidos y hace que los pies duelan e hinchen. Debido a que muchos tratamientos están prohibidos en el embarazo, muchas futuras madres se preguntan si el remojo de los pies es uno de ellos. Dependiendo de la temperatura de su agua, un baño de pies puede ser una terapia beneficiosa, y una que se siente fantástica para arrancar.
Sales de remojo
Aunque la mayoría de las sales de baño son seguras para rociar en el baño de pies, la sal de Epsom es especialmente útil para las mujeres embarazadas. Compuestos de sulfato de magnesio, estos minerales con forma de diamante contienen compuestos esenciales que absorben los pies al remojarse. El magnesio es importante para el cuerpo porque regula más de 300 reacciones bioquímicas, ayuda a la función muscular y nerviosa, mantiene los huesos fuertes y apoya el sistema inmunológico.
Beneficios
Según la Asociación Americana del Embarazo, el cuerpo de una mujer embarazada produce aproximadamente un 50 por ciento más de sangre y fluidos corporales que antes del embarazo. Parte de este líquido se acumula en los pies y los tobillos, una afección común llamada edema. Más que un tratamiento de mimos, los baños de pies ayudan a las futuras madres a controlar la hinchazón y disminuir la tensión en los pies. Dado que el calor y un día largo en los pies contribuyen al edema, los baños de pies son especialmente útiles en los días calurosos y ocupados.
Riesgos
Debido a que el agua caliente puede aumentar la temperatura de su cuerpo y dañar las células en desarrollo de su bebé, los baños calientes presentan riesgos cuando el agua está demasiado caliente. Además, el agua demasiado caliente puede aumentar su ritmo cardíaco y reducir el flujo de sangre a su bebé. El agua que está cerca de la temperatura de su propio cuerpo, o por debajo de 100 grados F, es segura, dice Catherine Lynch, OB-GYN en un artículo para Baby Center. Aunque estos riesgos generalmente se aplican al bañarse, es posible aumentar la temperatura de su cuerpo al remojar sus pies en agua humeante. Sin embargo, es probable que una cuenca poco profunda de agua se enfríe rápidamente y, por lo tanto, es la opción más segura.
Riesgos de diabetes
Los baños de pies pueden ser riesgosos para las mujeres embarazadas con diabetes porque las infecciones de los pies son comunes debido a la disminución de la circulación en los pies. Una ruptura en la piel permite la entrada de bacterias, lo que puede provocar infecciones o complicaciones potencialmente mortales. Debido a que las tuberías que transportan el agua pueden introducir bacterias, las mujeres diabéticas deben realizar controles regulares de los pies para asegurarse de que no haya úlceras o cortes antes de remojar los pies en casa o en un salón de belleza.
Consideraciones
Aunque los baños de pies generalmente son seguros, nunca debe usarlos para tratar el edema sin consultar a su médico. La mayor hinchazón en los pies es común en el embarazo, particularmente en el tercer trimestre, pero para algunas mujeres es un problema. Si la hinchazón se extiende repentinamente a las manos y la cara, consulte a su médico para descartar la preeclampsia, una afección potencialmente peligrosa que puede desarrollarse al final del embarazo.