La alergia alimentaria afecta aproximadamente al 5 por ciento de los niños y al 4 por ciento de los adultos en los Estados Unidos, según el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas. Aunque el 90 por ciento de la alergia alimentaria es causada por huevos, trigo, soja, nueces, leche, pescado y mariscos, puede desarrollarse alergia a cualquier alimento, incluida la carne roja.
Antecedentes
Una alergia a la proteína en la carne roja se desarrolla cuando el sistema inmune identifica erróneamente la proteína como una sustancia potencialmente dañina. Un anticuerpo conocido como inmunoglobulina E, o IgE, se forma en respuesta a la proteína y es específico para esa proteína en particular. Cuando la persona vuelve a comer carne roja, la IgE responde a la proteína y libera sustancias químicas que provocan los síntomas de una reacción alérgica.
Síntomas
Los síntomas generalmente se desarrollan dentro de minutos a una hora después de la ingestión de carne roja o de un producto alimenticio que contiene carne roja. La urticaria, una erupción cutánea con picazón compuesta de ronchas rojas, es un síntoma común, aunque los síntomas de la piel pueden ser más leves y presentarse como una erupción localizada alrededor de la boca o la cara. El tracto gastrointestinal puede estar involucrado, con síntomas de náuseas y vómitos. La dificultad para respirar, la tos y el cambio de voz son síntomas de una reacción alérgica más grave. Las personas que notan síntomas horas después de comer carne roja pueden ser alérgicas a un carbohidrato que se encuentra en la carne en lugar de a la proteína.
Diagnóstico
A menudo se sospecha un diagnóstico de alergia a la proteína en la carne roja sobre la base del historial clínico de una persona o la cadena de eventos que condujeron a la reacción. La alergia se puede confirmar realizando un pinchazo en la piel o un análisis de sangre. Una prueba de punción cutánea consiste en rascar la superficie de la piel con una pequeña cantidad de alérgeno y medir la reacción. El análisis de sangre cuantifica el nivel de IgE a la proteína en la carne roja para determinar si los anticuerpos alérgicos están presentes.
Tratamiento
Evitar todas las carnes rojas y todos los productos alimenticios que contienen carnes rojas es el tratamiento principal para esta alergia. Si ocurre una exposición accidental, un antihistamínico como Benadryl puede tratar una reacción localizada como una erupción cutánea. Si se produce una reacción más sistémica, la epinefrina inyectable puede revertir la reacción. Todas las personas a las que se les diagnostica una alergia a la proteína en la carne roja deben llevar consigo epinefrina inyectable. Si se usa este medicamento, la persona debe ir a la sala de emergencias para una evaluación y tratamiento adicionales.
Consideraciones
El término "carne roja" abarca carne de res, cerdo, cordero y todas las carnes de mamíferos adultos. Sin embargo, algunas personas son alérgicas a las proteínas en un solo tipo específico de carne y pueden tolerar otras carnes. Por ejemplo, una persona podría ser alérgica a la carne de res pero tolerar el cerdo y el cordero sin dificultad. Las pruebas de diagnóstico pueden diferenciar entre una alergia a la proteína en la carne roja y una alergia a la proteína en carnes específicas. Además, se pueden realizar análisis de sangre para diagnosticar si una alergia a la carne roja está relacionada con un carbohidrato en la carne en lugar de con la proteína.