Los vasos sanguíneos en el ojo pueden tener fugas y, dependiendo de la ubicación de la hemorragia, es posible que no vea físicamente el sangrado. Un vaso roto en el blanco del ojo, llamado hemorragia subconjuntival, no suele indicar un problema grave; pero una hemorragia en el revestimiento posterior del ojo podría provocar cambios en la visión. Los nutrientes como la vitamina C no suelen proteger sus ojos de las hemorragias, pero los niveles bajos de vitamina C podrían aumentar sus riesgos.
Vitamina C
La vitamina C ayuda a proteger sus células del daño y ayuda a formar colágeno, una proteína necesaria para la curación de heridas. Esta vitamina también ayuda a fortalecer su sistema inmunológico.
La cantidad de vitamina C que necesita cada día variará según su edad, salud y factores de estilo de vida. El adulto promedio generalmente necesita entre 75 mg y 90 mg. Las necesidades de un niño también variarán, dependiendo de la edad. Muchos alimentos proporcionan vitamina C. Las fuentes incluyen naranjas, fresas, brócoli y papas.
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Este nutriente no trata las hemorragias oculares, pero las investigaciones sí indican un vínculo entre la vitamina C y el sangrado en la retina, el revestimiento posterior del ojo. Una ingesta significativamente baja de vitamina C podría provocar escorbuto, una afección grave que puede provocar la pérdida de dientes y cabello, así como dolor e hinchazón en las articulaciones. El escorbuto debilita los vasos sanguíneos y esto aumenta el riesgo de hematomas y sangrado.
En 1999, los oftalmólogos en Ohio evaluaron a una adolescente que tuvo un caso prolongado de escorbuto que le causó sangrado en la parte posterior de ambos ojos.
Tratamiento
El sangrado en la retina a menudo requerirá una intervención quirúrgica para detener el sangrado. El tratamiento preciso variará, dependiendo de la extensión y ubicación de la hemorragia, pero su médico puede recomendar un procedimiento con láser que sellará el vaso sanguíneo con fugas.
Consideraciones
Comuníquese con su médico de inmediato si nota cambios en su visión, ya que un cambio repentino podría indicar una hemorragia retiniana. La atención médica inmediata puede ayudarlo a prevenir la pérdida permanente de la visión.