Así como comes para nutrir el resto de tu cuerpo, también debes nutrir tu cerebro. Las proteínas, las grasas, los carbohidratos, las vitaminas y los minerales proporcionan nutrientes que mantienen el funcionamiento del cerebro, previenen las deficiencias y promueven las actividades de las sustancias conocidas como neurotransmisores, los mensajeros químicos en el cerebro. Dichos nutrientes deben atravesar la barrera hematoencefálica para ingresar al cerebro.
La digestión primero
Antes de que cualquier nutriente pueda ingresar al cerebro, primero debe digerirse. El cerebro no puede usar un filete de res en su forma original, pero puede usar los aminoácidos contenidos en la carne. El sistema digestivo descompone todos los alimentos en sus componentes, que incluyen aminoácidos, azúcares, vitaminas, ácidos grasos y minerales. Son estas sustancias las que se mueven al torrente sanguíneo y circulan a las células del cuerpo. Sin embargo, el cerebro tiene un mecanismo de protección, la barrera hematoencefálica, o BBB, para abreviar, que impide o limita que las sustancias peligrosas lleguen a las células cerebrales y afecta la forma en que los nutrientes ingresan al cerebro.
La glucosa es crítica
La glucosa es el combustible principal para todas las células del cuerpo, incluidas las células del cerebro. Los almidones y azúcares en los carbohidratos, que se encuentran en alimentos como granos enteros, papas, verduras o frutas frescas, son la fuente principal de los azúcares complejos que su cuerpo digiere en azúcares simples que puede absorber. Aunque los carbohidratos normalmente proporcionan la mayor parte de la glucosa que su cerebro y cuerpo necesitan, su cuerpo también puede fabricar glucosa a partir de grasas y proteínas mediante un proceso llamado gluconeogénesis. La glucosa cruza fácilmente el BBB.
Bloques de construcción de proteínas
Las proteínas están hechas de diferentes aminoácidos, cada uno de los cuales tiene una función diferente en el cuerpo. Una de las funciones más importantes para los aminoácidos es la fabricación de neurotransmisores, que afectan su estado de ánimo y la función general de su sistema nervioso. Obtener aminoácidos a través del BBB implica moléculas transportadoras, que proporcionan un vehículo de transporte para los aminoácidos. Además, las moléculas transportadoras deben recorrer rutas específicas a través del BBB para ingresar al cerebro.
Grasas y ácidos grasos
Al igual que las proteínas y la glucosa, su cuerpo descompone las grasas en sus componentes principales, como los ácidos grasos. Es posible que ya esté familiarizado con ácidos grasos como omega-3 y omega-6. Las deficiencias en ácidos grasos como el ácido docosahexaenoico pueden estar relacionadas con el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer, según un artículo de diciembre de 2013 en "Science Daily". Un estudio publicado en el "Journal of Internal Medicine" de enero de 2014 encontró que cuando las personas con enfermedad de Alzheimer recibieron suplementos de ácidos grasos omega-3, que cruzan el BBB, el nivel de ácidos grasos en sus cerebros aumentó.
Otros nutrientes
Otros nutrientes también cruzan el BBB. El agua, por ejemplo, puede no ser algo que normalmente piensas como un nutriente, pero es fundamental para la función adecuada del cuerpo y el cerebro. Minerales como el potasio y el sodio circulan en el torrente sanguíneo y cruzan el BBB. Las vitaminas también cruzan el BBB, aunque algunas, como la vitamina B-6 y la vitamina B-12, necesitan moléculas transportadoras o transportadoras, según un artículo de "BioMed Central" de junio de 2009.