Ya sea que esté lidiando activamente con el cáncer o que esté actualmente en remisión, comer una dieta equilibrada y nutritiva puede ayudarlo a sentirse mejor física y mentalmente. Aunque es probable que su médico le brinde consejos sobre alimentos saludables, comprender que una nutrición adecuada puede beneficiar a su cuerpo a medida que lucha contra su enfermedad puede motivarlo a planificar comidas saludables por adelantado. Un plan de comidas para pacientes con cáncer debe incluir alimentos de una variedad de grupos de alimentos.
Significado
De acuerdo con el Centro Integral del Cáncer de la Universidad de Michigan, la nutrición adecuada para los pacientes con cáncer juega un papel en su capacidad para manejar tratamientos, cirugía u otros procedimientos médicos. A medida que come alimentos saludables, su cuerpo está en mejores condiciones para reconstruir el tejido. La buena comida también te da energía y fuerza, lo que puede ayudarte tanto física como mentalmente. La UMCCC indica que en algunos casos, un paciente con cáncer alimentado adecuadamente puede tolerar tratamientos más agresivos que uno que no lo es.
Desayuno y Snacks
Un desayuno equilibrado y dos refrigerios pueden ayudarlo a prepararse para los próximos tratamientos o darle energía para su día. Tome una taza pequeña de jugo de naranja, un huevo revuelto o frito y una tostada integral para el desayuno. Si tiene problemas para tragar, pruebe un batido de frutas y yogurt y un tazón de avena tibia. Si tiene náuseas, evite los alimentos grasosos para el desayuno, como la salchicha de pavo o el tocino. Los refrigerios saludables incluyen cereal y leche, yogurt, 1/2 taza de fruta enlatada, paletas de hielo 100% de fruta, pudín hecho con leche descremada o nueces. Si tiene más hambre temprano en el día, el Instituto Nacional del Cáncer recomienda comer la mayoría de sus calorías cuando tenga hambre para tratar de satisfacer sus necesidades nutricionales.
Almuerzo y cena
La sopa es un alimento abundante y fácil de comer si tiene falta de apetito o le resulta difícil masticar y tragar carnes o panes gruesos. Las sopas de verduras, las sopas de pollo con fideos o las sopas de frijoles suaves son buenas opciones. Los mariscos, como el salmón a la parrilla o al horno, le proporcionan las grasas necesarias que pueden ayudar a su cuerpo a reparar los tejidos. Las cazuelas de pollo, el pavo al horno o el tostón tierno le ofrecen proteínas, que su cuerpo necesita tanto durante como después de los tratamientos. Otras opciones de proteínas incluyen frijoles, que puede usar como plato principal para el almuerzo o la cena, o sustitutos de carne vegetarianos como las hamburguesas de soja. Las guarniciones saludables incluyen vegetales cocidos o crudos, pan integral, fruta, espagueti integral o ensaladas verdes. Si está perdiendo peso, agregue calorías de batidos, yogurt graso regular, aderezos para ensaladas y queso a su dieta.