Los cambios en las cantidades de diferentes minerales en la sangre pueden afectar muchos tejidos, incluido el corazón. Aunque su cuerpo solo contiene pequeñas cantidades de magnesio, tener demasiado o muy poco magnesio puede afectar el ritmo cardíaco. Hable con su médico antes de tomar magnesio o cualquier otro tipo de suplemento.
Fuentes de magnesio y función
El magnesio es el cuarto mineral más abundante en el cuerpo, y aproximadamente la mitad del magnesio de su cuerpo se almacena en sus huesos. La mayor parte del resto del magnesio se encuentra dentro de las células y los órganos, pero una pequeña cantidad circula por el cuerpo en la sangre. El magnesio mantiene sus nervios y músculos funcionando correctamente, apoya su sistema inmunológico y regula sus niveles de azúcar y presión arterial. Los vegetales verdes, algunas legumbres, los granos integrales y el agua del grifo "dura" proporcionan magnesio.
Deficiencia de magnesio
Magnesio como tratamiento de arritmia
Debido a que el magnesio juega un papel fundamental en el control de su ritmo cardíaco, a veces se administra por vía intravenosa en los hospitales a pacientes con problemas cardíacos. Esto ayuda a prevenir un tipo de arritmia conocida como fibrilación auricular. Las personas que tienen insuficiencia cardíaca congestiva también tienen una mayor probabilidad de desarrollar latidos cardíacos irregulares. Si tiene insuficiencia cardíaca congestiva, su médico puede indicarle que tome un suplemento de magnesio.
Toxicidad
Aunque los suplementos de magnesio pueden ayudarlo a mantener su ritmo cardíaco normal, demasiado magnesio puede ser tóxico. Uno de los primeros signos de toxicidad por magnesio es la diarrea. La toxicidad del magnesio también puede causar presión arterial baja, confusión, letargo, insuficiencia renal y anormalidades en el ritmo cardíaco. Hable con su médico antes de tomar cualquier tipo de suplemento que contenga magnesio para que no sufra una sobredosis accidental.
