Un elemento traza que es esencial para la función tiroidea, el yodo está presente en pocos alimentos, pero los productos lácteos son una fuente nutritiva de yodo. De hecho, los alimentos lácteos se encuentran entre sus mejores opciones para obtener los 150 microgramos de yodo que necesita cada día porque las glándulas mamarias tienden a concentrarlo, según Jim Mann y Stewart Truswell, autores de "Essentials of Human Nutrition".
Leche
Una porción de 8 onzas de leche baja en grasa contiene 56 microgramos de yodo. Eso se traduce en el 37 por ciento de los 150 microgramos que los adultos sanos necesitan diariamente. Con 51 microgramos de yodo, la leche sin grasa contiene un poco menos de yodo que las versiones con bajo contenido de grasa. La leche entera y la leche con chocolate también contienen yodo.
Queso
La mayoría de los quesos contienen una cierta cantidad de yodo, pero la cantidad exacta depende del tipo de queso que esté comiendo. Una onza de queso cheddar, por ejemplo, contiene 12 microgramos de yodo, que es el 8 por ciento de la cantidad que necesita para el día. El queso mozzarella también es una buena fuente de yodo, según HealWithFood.org. El queso de oveja y cabra también suministra yodo.
Yogur
Además de ser una buena fuente de calcio y proteínas, el yogur también es una fuente dietética nutritiva de yodo. Una taza de yogurt natural sin grasa tiene 75 microgramos de yodo, lo que se traduce en un 50 por ciento de lo que debe tener para el día. El yogur con sabor a frutas también contiene yodo, pero la cantidad exacta depende de la cantidad de yodo que haya en la leche utilizada para hacer el yogur.
Postres a base de leche
Aunque los postres no deberían tener un papel protagónico en su plan de alimentación saludable porque a menudo contienen grandes cantidades de grasas saturadas y azúcar poco saludables, sí ofrecen algunos beneficios, incluido el yodo. Una porción de 1/2 taza de helado de chocolate, por ejemplo, proporciona 30 microgramos de yodo, que es una quinta parte de lo que debe tratar de obtener cada día. El yogurt congelado, el pudín y las natillas contienen yodo, aunque la cantidad exacta depende de la cantidad de leche o crema que requiera la receta.
