Corredores, moteros, levantadores de pesas: todos son susceptibles al dolor en los isquiotibiales. Cuando el dolor continúa más allá de uno o dos días, el área parece hinchada y el músculo parece rígido, entonces puede estar sufriendo de tendinopatía de los isquiotibiales laterales, una condición en la cual el bíceps femoral, el músculo lateral de los isquiotibiales, se inflama en el punto donde su tendón se inserta en el hueso en la parte posterior de la rodilla.
Causas de la tendinopatía
Si eres un atleta, es más probable que experimentes tendinopatía de los isquiotibiales laterales. Esto se debe a que es particularmente común en actividades que requieren una contracción fuerte y repetitiva de los isquiotibiales, como correr, saltar y patear, así como en deportes en los que frecuentemente aceleras y desaceleras, como en el fútbol.
Sin embargo, la condición también puede ocurrir en un movimiento, cuando una fuerza fuerte atraviesa los tendones de los isquiotibiales. Esto podría ser cuando un jugador de fútbol realiza un golpe fuerte y fuerte o un corredor acelera rápidamente, particularmente si no ha hecho un calentamiento adecuado.
Lidiando con el Dolor
Considere hablar con su médico sobre lo que recomienda para el alivio del dolor y la curación cuando se trata de tendinopatía. Sin embargo, las tácticas comunes de recuperación incluyen el uso de compresas de hielo en los isquiotibiales, especialmente justo cuando ocurre la lesión. Aplique el hielo durante 10 a 15 minutos cada hora durante las primeras 24 a 48 horas. Después de ese tiempo, comience a aplicar calor para relajar el músculo y ayudar a que la sangre circule.
Fortalecimiento de los isquiotibiales
Antes de volver a la actividad regular, ya sea ejercicio o deporte, fortalezca los isquiotibiales y el tendón con un par de ejercicios.
1. Contracción estática de los isquiotibiales
Siéntese en una silla o banco y coloque la pierna de modo que la rodilla esté doblada a unos 45 grados. Mientras presiona el talón contra el piso, apriete los músculos isquiotibiales. Mantenga durante 5 segundos y suelte, luego repita 10 veces, o tantas veces como pueda sin dolor.
2. Levantamiento de pierna recta
Acuéstese sobre el suelo boca arriba con la pierna afectada estirada y la pierna no lesionada doblada. Levante la pierna lesionada hasta que sienta un ligero estiramiento. Mantenga durante 2 segundos y luego baje la pierna hacia el suelo. Repite 10 veces.