Dependiendo del tipo de ejercicio descalzo que uno elija, saltarse las zapatillas de deporte, a favor de ejercitarse descalzo, puede ser beneficioso para sus pies y tobillos. Ir descalzo puede fortalecer los músculos, mejorar la estabilidad y mejorar la propiocepción para un mejor equilibrio.
Propina
Los receptores altamente sensibles de sus pies pueden embotarse cuando los zapatos pesados los sostienen. Hacer ejercicios descalzos puede ayudar a mejorar la estimulación sensorial y construir pies y tobillos más fuertes y estables.
Los beneficios de andar descalzo
Los ejercicios y estiramientos descalzos realizados durante actividades como yoga, Pilates, barra, Zumba y clases de baile pueden mejorar la flexibilidad y fortalecer los músculos de los pies y los tobillos. Los nervios en la parte inferior de los pies son muy sensibles, pero esos mismos receptores se ven privados de la estimulación sensorial cuando se usan zapatos, lo que conduce a un posible debilitamiento de los músculos de los pies.
Hacer ejercicios descalzos y estiramientos fortalece los pies y los músculos del tobillo, mejorando su flexibilidad general, destreza y reactividad, según Harvard Health. Estas actividades descalzas también ayudan a mejorar la estabilidad en los ligamentos que sostienen los tobillos y los pies.
Estar descalzo permite un mejor control sobre la posición de su pie cuando golpea el suelo, mejorando el equilibrio, la propiocepción y la conciencia del cuerpo. Esto, a su vez, conduce a una mejor mecánica y alineación en las rodillas, las caderas y el núcleo, lo que puede prevenir o reducir la lumbalgia y otros dolores en las articulaciones.
Impacto de carrera reducido en las articulaciones
Si bien correr descalzo puede presentar algunos riesgos, los corredores descalzos pueden correr menos fuerza excesiva en las articulaciones que los corredores que usan zapatos convencionales, según la Clínica Mayo. Los corredores descalzos tienden a ser "huelguistas del mediopié", lo que reduce el impacto de correr sobre el tejido blando y las articulaciones de las extremidades inferiores.
Correr descalzo también puede contribuir a menos esguinces, férulas de espinilla y aparición de fascitis plantar, una inflamación del tejido conectivo en la parte inferior del pie. Además, correr sin zapatillas o con zapatos livianos que simulan correr descalzo puede aumentar la velocidad de carrera.
El American Council on Exercise dice que los corredores descalzos generalmente corren más suavemente, aterrizando más cerca de las bolas de la sensación, lo que causa menos golpes e impacto en las articulaciones en comparación con los corredores tradicionales de golpe de talón. Además, correr descalzo en una playa agrega resistencia que obliga a tus músculos a trabajar más, para un entrenamiento más desafiante.
Cuando ir descalzo
Si bien andar descalzo es el estándar para ciertos ejercicios, como deportes acuáticos, danza, yoga, barra y Pilates, otras actividades, como el levantamiento de pesas y el entrenamiento cruzado en un entorno grupal, se adaptan mejor a la protección y la estabilidad que ofrece el uso de un zapatilla de deporte
Harvard Health recomienda agregar ejercicios de flexibilidad y resistencia para los pies en su rutina diaria. Algunos incluso se pueden hacer sentados en un escritorio o de pie descalzos con una pared cercana para mayor estabilidad. Siempre asegúrese de estirar los músculos de sus pies antes de cualquier actividad física, especialmente aquellos que son de alto impacto, como los ejercicios aeróbicos, para evitar que sus pies y tobillos sufran de repente la mayor fuerza adicional.
Las personas con afecciones como diabetes, artritis o problemas estructurales del pie deben consultar con su médico antes de hacer cualquier tipo de ejercicio descalzo.