Su cerebro es el órgano más crucial de su cuerpo, ya que controla todos los movimientos y funciones en el resto de su cuerpo. Si bien una dieta sana y equilibrada es clave para una buena salud general, su cerebro deriva la nutrición y la energía de alimentos específicos, principalmente carbohidratos, pero también de ácidos grasos, que proporcionan combustible en forma de cetonas.
Los carbohidratos y el cerebro.
La función principal de los carbohidratos en su dieta es proporcionar energía y combustible a su cuerpo, especialmente a su cerebro. Los carbohidratos se descomponen en glucosa en su cuerpo, que luego se utiliza como energía. Los carbohidratos complejos son carbohidratos que se descomponen más lentamente en su sistema, proporcionando una fuente de energía más gradual que los carbohidratos simples, lo que puede causar picos en los niveles de azúcar y energía en la sangre. Los carbohidratos complejos incluyen comida llena de fibra como legumbres, vegetales con almidón y granos integrales. Entre el 40 y el 60 por ciento de su ingesta diaria de calorías debe provenir de carbohidratos, idealmente fuentes ricas en fibra de carbohidratos.
El glucógeno y el cerebro
Cuando su cuerpo produce demasiada glucosa, se almacena en el hígado y los músculos como glucógeno, donde se puede usar más adelante para proporcionar energía a su cuerpo y a su cerebro. Investigaciones recientes sobre el papel del glucógeno como fuente de energía para el cerebro descubrieron que no solo proporciona el combustible necesario, sino que el glucógeno es crucial para la actividad de comunicación dentro del cerebro, así como para mantener la función de la memoria, proporcionando la energía necesaria a nivel subcelular.. Los investigadores que publicaron sus hallazgos en una edición de 2012 de "Frontiers of Neuroenerggetics" también descubrieron que el glucógeno también era importante para la función cerebral general saludable.
Cetonas para el cerebro
Las cetonas son elementos solubles en agua que se crean cuando los ácidos grasos se descomponen. Su cuerpo recurre a los ácidos grasos como fuente de energía para sus actividades, incluida la energía del cerebro, cuando su cuerpo no tiene suficiente glucosa, ya sea de la dieta o en el almacenamiento. Cuando su cuerpo tiene poca glucosa, pero las reservas de glucógeno no se agotan por completo, las cetonas se descomponen principalmente para alimentar su función cerebral, ya que sus otros órganos y músculos pueden alimentarse a través de la glucosa almacenada.
Importancia de la proteína
Si bien la proteína no proporciona energía directamente a su cerebro, su cerebro la necesita para crear las vías necesarias para una función cerebral saludable. Todas las proteínas, ya sean de origen vegetal o animal, contienen aminoácidos, que su cerebro utiliza para producir neurotransmisores. Estos neurotransmisores son cruciales para la función cerebral ya que permiten que las células individuales en su cerebro se comuniquen y se conecten en red. Si bien la mayoría de los estadounidenses obtienen suficientes proteínas en su dieta, el Departamento de Agricultura de los EE. UU. Recomienda una mezcla de proteínas de origen animal y vegetal, además de comer mariscos dos veces por semana. La ingesta recomendada es de 5 a 6 1/2 onzas por día para una dieta promedio.