Su sistema respiratorio es responsable de suministrar oxígeno a su sangre. Sus pulmones le permiten absorber oxígeno y exhalar dióxido de carbono. Su tráquea filtra el aire que respira, mientras que su diafragma, un músculo redondeado, apoya la respiración saludable. Las condiciones médicas que pueden interferir con la respiración incluyen bronquitis, asma, cáncer de pulmón, enfisema, fibrosis quística e infecciones de las vías respiratorias superiores, como la sinusitis. Además de las prácticas y medicamentos de estilo de vida saludable, cuando sea necesario, ciertos alimentos pueden ayudar a fortalecer su sistema respiratorio.
Yogur y kéfir
El yogur y el kéfir son productos lácteos cultivados que proporcionan grandes cantidades de proteínas, calcio y probióticos, bacterias saludables o "amigables" que promueven el bienestar digestivo. Según una investigación publicada en el "British Medical Journal" en junio de 2001, los probióticos pueden ayudar a prevenir infecciones respiratorias. Para el estudio, 571 niños sanos entre las edades de 1 y 6 recibieron probióticos o un placebo durante siete meses. Los investigadores encontraron que los niños que consumieron probióticos desarrollaron menos síntomas de infección respiratoria y ausencias de la guardería que los niños que no lo hicieron. Los probióticos también pueden ayudar a reducir su frecuencia o gravedad de los síntomas del resfriado. Para obtener los máximos beneficios de los probióticos, consuma yogur y / o kéfir con "cultivos activos vivos", como lactobacillus, de forma rutinaria.
Frutas y vegetales
Las frutas y verduras suministran cantidades ricas de antioxidantes, nutrientes que respaldan la capacidad de su sistema inmunológico para proteger su cuerpo de infecciones, enfermedades y toxinas asociadas con el cáncer. El Centro Médico de la Universidad de Maryland recomienda una dieta rica en antioxidantes para todas las personas con afecciones crónicas, como el asma. La vitamina C antioxidante, prevalente en pimientos rojos, frutas y jugos cítricos, papaya, kiwi, verduras de hoja verde, repollo y coles de Bruselas, puede proporcionar ayuda para aliviar la inflamación en su sistema respiratorio. En general, incorpore una variedad de frutas y verduras coloridas y enteras, que tienden a proporcionar los mayores beneficios antioxidantes, en sus comidas y meriendas regularmente.
Fluidos calientes
Un plato de sopa minestrone. Crédito: Robyn Mackenzie / iStock / Getty ImagesLos líquidos tibios, como tés de hierbas, caldos, sopas y agua tibia, promueven la hidratación y ayudan al cuerpo a eliminar las toxinas a través de la orina. La sopa de pollo proporciona un valioso remedio dietético para los resfriados, la mucosidad y el dolor de garganta relacionados con afecciones respiratorias, según el Centro Médico de la Universidad de Maryland. El pollo en la sopa proporciona aminoácidos, que mejoran la reparación del tejido magro y la fuerza física. Las adiciones adicionales de sopa rica en proteínas incluyen frijoles, lentejas, pescado y pechuga de pavo. La incorporación de vegetales a las sopas proporciona beneficios antioxidantes adicionales. Elija sopas a base de caldo con mayor frecuencia, ya que las sopas cremosas pueden interferir con la mucosidad y la congestión.
Pescado grasoso
Salmón a la plancha con verduras. Crédito: Creatas / Creatas / Getty ImagesLos pescados grasos, como el salmón, el atún blanco, el arenque, la trucha de lago, la platija, el halibut y las sardinas, son las principales fuentes de ácidos grasos omega-3, grasas saludables asociadas con una mejor salud cardíaca y función cerebral. Aunque se necesitan datos y análisis adicionales, según una revisión de investigación realizada por el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU., Las grasas omega-3 pueden mejorar la dificultad para respirar y otros síntomas asmáticos. Para evitar la ingesta excesiva de grasas saturadas, que puede empeorar la inflamación, use métodos de cocción bajos en grasa, como asar, hornear y cocinar al vapor, con mayor frecuencia.