La médula espinal está formada por nervios que transmiten mensajes de ida y vuelta entre el cerebro y los músculos y otros tejidos. Está protegido por la columna vertebral que se compone de huesos apilados conocidos como vértebras. La compresión de la médula espinal ocurre en cualquier lugar desde el cuello hasta el extremo inferior de la columna vertebral. El tratamiento varía según la gravedad de la compresión, pero puede incluir ejercicios específicos.
Condiciones y síntomas
Si bien el desgaste gradual sigue siendo la causa más común de compresión de la médula espinal, otras afecciones también pueden causar compresión. La osteoartritis, la alineación anormal de la columna vertebral, las lesiones y las infecciones son las causas más comunes. Cuando se produce compresión, los síntomas incluyen dolor y rigidez, entumecimiento, ardor y pérdida de sensibilidad en los pies.
Ejercicio de extensión
Mejorar la fuerza y flexibilidad del cuello con ejercicios simples puede disminuir el dolor y puede recomendarse para el tratamiento básico. Uno de los ejercicios más básicos comienza con sentarse derecho con ambas manos detrás del cuello. Inclínate suavemente hacia adelante, permitiendo que los codos se muevan hacia los muslos. Continúe doblando hasta que sienta un estiramiento, y luego lentamente vuelva a la posición vertical. Repita 10 veces o menos si experimenta dolor. Este simple ejercicio abre las vértebras y descomprime la médula espinal.
Extensión de curvatura lateral
Una curva lateral también descomprime las vértebras. Comience en una posición sentada con la espalda recta y ambas manos detrás de la cabeza. Doble suavemente hacia su lado derecho, moviendo el codo hacia la cadera con un estiramiento suave. Evite inclinarse hacia adelante o hacia atrás. Vuelva lentamente a una posición vertical y luego repita en el lado izquierdo. Este ejercicio puede repetirse hasta 10 veces en cada lado.
Ejercicios aeróbicos
Cuando la compresión espinal se localiza en la parte baja de la espalda, el ejercicio aeróbico alivia el estrés y también provoca una mayor liberación de endorfinas, que son los analgésicos naturales del cuerpo. Andar en bicicleta estacionaria como ejercicio aeróbico mantiene la columna ligeramente doblada hacia adelante y abre el canal espinal, disminuyendo la compresión de la columna. Otros ejercicios aeróbicos para esta afección incluyen caminar o nadar, que tienen beneficios similares para la columna vertebral.