La mayoría de las personas entienden los beneficios del ejercicio físico regular (una mejor figura, una mayor fuerza y destreza y más resistencia), pero pocos son conscientes de lo que les sucede a sus músculos cuando deja de entrenar y les permite estar inactivos.
A medida que su cuerpo pasa a un estado sedentario, los músculos experimentan una inversión. Comprender cómo funcionan los músculos y qué les sucede cuando dejas de hacer ejercicio te ayudará a estructurar un régimen de entrenamiento y a garantizar el mantenimiento de tu masa muscular y tu definición.
Propina
Los músculos no se vuelven gordos cuando dejas de entrenar con pesas. Sin embargo, pierden masa. Cualquier aumento de grasa que observe vendrá de comer la misma cantidad que estaba comiendo anteriormente, o más, y no hacer ejercicio para quemar calorías.
Cómo funcionan los músculos
Cuando haces ejercicio, tu cuerpo en realidad no crea nuevos músculos. En cambio, sus músculos existentes se hacen más grandes y más fuertes, y aumenta la cantidad de capilares (los vasos sanguíneos en red entre las arteriolas y las vénulas).
Con el ejercicio regular, los músculos también desarrollan más mitocondrias, aquí es donde se producen procesos bioquímicos de respiración y producción de energía en la célula. El resultado es una masa muscular más grande y más definida, no tejido muscular recién creado.
El American Council on Exercise dice que algunas personas tienen impreso en su ADN para aumentar la masa muscular más grande que otras. Pero el músculo es músculo, independientemente de si es grande o pequeño, y si entrenas con pesas o no, tus músculos seguirán allí.
Del ejercicio a la inactividad
Adoptar un estilo de vida sedentario, o inactivo, tiene el efecto contrario en los músculos. El aumento del flujo sanguíneo previamente necesario para alimentar sus células durante el ejercicio ya no es necesario, y su cuerpo comienza a contraerse y reducir el tamaño de sus capilares.
Puede tener miedo de que los músculos se vuelvan gordos o desaparezcan, pero en su lugar, todo lo que hacen es encogerse y disminuir su masa. Según la Academia Nacional de Medicina del Deporte, la grasa puede producirse si su dieta proporciona a su cuerpo más calorías de las que necesita para el nivel de actividad que mantiene, pero su cuerpo no transforma mágicamente el músculo en grasa.
No dejes que tus músculos se atrofien
Si bien suspender el ejercicio puede disminuir el tamaño de los músculos, una nutrición extremadamente pobre, el hambre y la enfermedad pueden causar atrofia muscular, donde los músculos pueden desgastarse por completo.
Sin las calorías, vitaminas y nutrientes de los alimentos saludables, su cuerpo está en un estado de desnutrición. Esto no solo causa daño permanente a otros órganos, sino que también puede causar la muerte.
Manteniendo tus músculos
Mantenerse activo y seguir una dieta saludable significa mantener la masa muscular y evitar la acumulación de exceso de grasa corporal.
Las Pautas de actividad física para los estadounidenses recomiendan de 150 a 300 minutos de cardio moderadamente intenso a la semana para mantener la salud y un buen nivel de condición física; y al menos dos días de entrenamiento de fuerza.
Además de los torneos de levantamiento de pesas o el entrenamiento para un triatlón, dedicar al menos 20 a 30 minutos al día a la actividad mantendrá sus músculos saludables y listos para cuando los necesite.