El dolor de espalda baja es una de las dolencias más comunes y afecta a alrededor del 60 al 80 por ciento de la población adulta en los Estados Unidos, según el Centro Médico de la Universidad de Maryland. El dolor de espalda crónico (dolor de espalda que dura más de tres meses) puede ir acompañado de dolor muscular y rigidez que puede debilitarse si no se trata. Solo un proveedor de atención médica calificado puede determinar el tratamiento adecuado para su afección.
Causas
El dolor crónico en la parte baja de la espalda puede comenzar como un dolor agudo en la parte baja de la espalda con un evento repentino, como una caída o un accidente, o puede deberse a hacer cosas de manera incorrecta, como levantar objetos, pararse o cualquier movimiento repetitivo, durante un período. Otras causas posibles incluyen enfermedad degenerativa del disco, fibromialgia, artritis reumatoide, hernia de disco, osteoporosis, escoliosis o cifosis, tensión o desgarros en los ligamentos o músculos de soporte, y mala postura. Sus posibilidades de experimentar dolor muscular y rigidez, junto con dolor de espalda, aumentan si tiene sobrepeso, fuma, no hace ejercicio o si es mayor de 30 años.
Síntomas
La intensidad del dolor lumbar crónico puede variar de leve y apenas perceptible a extremo y debilitante. Los síntomas dependen de la causa, pero generalmente incluyen dolor muscular y espasmos, rigidez matutina, dificultad para pararse después de estar sentado un rato y sensibilidad en la parte baja de la espalda. Si su dolor proviene de una hernia de disco o una lesión que afecta el nervio ciático, también puede experimentar dolor, hormigueo o debilidad en las piernas y los pies.
Tratamiento
El tratamiento del dolor lumbar crónico varía según la causa. El manejo del dolor puede incluir fisioterapia, usar un aparato ortopédico para la espalda para apoyo adicional, terapias de frío y calor o terapia de masaje para músculos doloridos y rígidos. Su proveedor de atención médica puede recomendar medicamentos que incluyen medicamentos antiinflamatorios no esteroideos, analgésicos, anticonvulsivos o antidepresivos. Si tiene una hernia de disco o una afección que causa daño a los nervios, las opciones quirúrgicas pueden ser necesarias e incluir una discectomía, laminectomía, fusión espinal o foraminotomía.
Prevención y Atención
Las recomendaciones de la Clínica Cleveland para reducir y prevenir el dolor de espalda incluyen cambiar su peso de un pie a otro cada cinco a 15 minutos, si está parado en el mismo lugar, y mantener una buena postura, con los hombros derechos y la cabeza erguida. Además, siéntese en sillas con respaldo bajo, duerma de lado y doble las rodillas, y levante objetos pesados doblando las rodillas y manteniendo la espalda recta. Fortalezca sus músculos y mantenga su cuerpo en forma haciendo ejercicio de acuerdo con la evaluación de su médico de su condición y comiendo una dieta equilibrada y baja en grasas con muchas verduras, granos enteros y frutas.
