Cuando se trata de una buena nutrición para su bebé, la leche materna siempre es la mejor. Pero la leche materna no es una buena fuente de vitamina D, y algunos bebés pueden requerir suplementos de vitamina D, pero esto solo debe ocurrir bajo supervisión médica. El aceite de coco es una opción de grasa aceptable para los bebés, pero tampoco es una buena fuente de vitamina D. Consulte a su pediatra acerca de las necesidades de aceite de coco y vitamina D para su bebé antes de hacer cambios en la dieta de su bebé.
Vitamina D y Infantes
La vitamina D ayuda al cuerpo a absorber el calcio y juega un papel importante en la mineralización ósea. Los bebés que son amamantados, exclusiva o parcialmente, requieren suplementos de vitamina D porque la leche materna contiene solo una pequeña cantidad de la vitamina liposoluble, no lo suficiente como para prevenir el raquitismo, que es una condición que causa el ablandamiento de los huesos.
Nutrición con aceite de coco
El aceite de coco es una fuente concentrada de calorías y grasas, pero no es una buena fuente de ningún otro nutriente. Una cucharada de aceite contiene 117 calorías, 14 gramos de grasa total y 11 gramos de grasa saturada. El aceite de coco no contiene vitamina D, pero tiene cantidades pequeñas e insignificantes de vitamina E y K. La porción de 1 cucharada cumple con menos del 1 por ciento del valor diario de ambas vitaminas, con 0.01 unidad internacional de vitamina E y 0.1 miligramos de vitamina K.
Satisfacer las necesidades de vitamina D de su bebé
La Academia Estadounidense de Pediatría recomienda que todos los bebés alimentados con leche materna comiencen a suplementarse con vitamina D al nacer y continúen hasta que se desteten a una fórmula infantil o leche fortificada con vitamina D. Si bien el cuerpo puede producir su propia vitamina D a través de la exposición al sol, esta no es una forma segura para que los bebés satisfagan sus necesidades de vitamina D, según la Oficina de Suplementos Dietéticos. La AAP recomienda que los bebés no estén expuestos a la luz solar directa y que estén cubiertos para limitar la exposición dañina a la luz ultravioleta.
Usos para el aceite de coco
El aceite de coco puede ser una buena fuente de grasas y calorías para su bebé y se considera seguro agregarlo a la dieta a partir de los 4 meses. Los bebés necesitan una dieta alta en grasas para promover el crecimiento y el desarrollo del cerebro. Al agregar cualquier alimento nuevo a la dieta de su bebé, como el aceite de coco, solo agregue un alimento nuevo a la vez y vigile de cerca al bebé para detectar reacciones alérgicas. El aceite de coco se puede mezclar en cereales, frutas o verduras según lo tolere y dependiendo de la etapa de alimentación de su bebé.
