En la última década, las tasas de obesidad han aumentado a un nivel alarmante. Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, solo un estado, Colorado, tiene una tasa de obesidad total de menos del 20 por ciento de la población. La mayoría de los otros estados tienen un 25 por ciento o más de su población con puntajes de índice de masa corporal (IMC) lo suficientemente altos como para ser considerados obesos. Desafortunadamente, la obesidad lo pone en riesgo de una serie de enfermedades graves, como diabetes, enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer. Estos riesgos se reducen drásticamente a medida que pierde peso.
Establecer metas realistas
Al comenzar un programa de pérdida de peso, especialmente si es obeso, establezca objetivos realistas. Con los reality shows de pérdida de peso como "The Biggest Loser", muchas personas tienen la idea de que pueden perder 6 o más libras por semana. Una meta saludable para bajar de peso es 1 o 2 libras por semana. Puede que no parezca mucho, pero 1 o 2 libras por semana pueden resultar en la pérdida de entre 52 y 104 libras en un año.
Comience despacio
Crear cortes extremos en su dieta, o hacer ejercicio a un nivel demasiado intenso, no solo lo preparará para el fracaso, sino que también puede causar lesiones. Comience con pequeños cambios en su dieta y en las rutinas de ejercicio, como eliminar los refrescos regulares o salir a caminar por la cuadra. Estos pequeños pasos pueden hacer grandes cambios con el tiempo. A medida que ganes más fuerza, agrega ejercicios más difíciles o haz ejercicio por períodos más largos.
Ejercicio
Dieta
Al mirar su dieta, evite las dietas de moda, como las que eliminan un grupo de alimentos completo (como una dieta sin carbohidratos) o reducen su consumo de calorías por debajo de 1, 000 calorías por día. La mejor manera de determinar cuántas calorías puede comer, mientras alcanza su objetivo, es usar una calculadora de objetivo de calorías (ver Recursos).
Planificar comidas
Una vez que sepa cuántas calorías puede comer, concéntrese en una dieta equilibrada de frutas, verduras, proteínas, lácteos y granos integrales. El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) ha desarrollado un programa llamado MyPyramid, que puede ayudarlo a planificar sus comidas. Evite cortar todos los alimentos que desee. Está bien comer los alimentos que anhelas (como el chocolate), siempre y cuando comas una porción adecuada, en lugar de una bolsa entera de dulces.
Tener supervisión médica
Si su IMC es lo suficientemente alto como para ser considerado obeso, involucre a su médico en el proceso. Su médico puede asegurarse de que esté lo suficientemente saludable como para llevar a cabo su programa planificado de pérdida de peso y puede ayudarlo a diseñar un plan de dieta y ejercicio especializado para sus necesidades y objetivos. Su médico también puede ayudarlo a realizar un seguimiento de su progreso.