La creatina es un compuesto que el páncreas sintetiza en su cuerpo y se utiliza para producir energía en los músculos esqueléticos, con el 95 por ciento de la creatina almacenada en los músculos y el 5 por ciento restante en el cerebro. La creatina también se puede ingerir como un suplemento nutricional y una ayuda ergogénica diseñada para aumentar el rendimiento del ejercicio, principalmente la potencia y la fuerza muscular. La creatina es un compuesto bien estudiado; Sin embargo, sus efectos sobre el cerebro y el estado mental son menos conocidos.
La creatina y el cerebro
La creatina cruza fácilmente la barrera hematoencefálica, una barrera protectora alrededor de su cerebro que está diseñada para evitar las sustancias químicas y toxinas dañinas. Una vez dentro del cerebro, una molécula de creatina se une con una molécula de fosfato que produce el compuesto fosfato de creatina, o CP. La PC es una forma energizada de creatina que puede aumentar el consumo de energía de su cerebro. La presencia de PC en su cerebro puede mejorar la cognición y la memoria, pero también puede tener algunos efectos secundarios, de acuerdo con "Fisiología del deporte y el ejercicio" de Jack H. Wilmore et al.
Función de neurotransmisor
La creatina puede afectar la producción de neurotransmisores cerebrales, que son compuestos químicos similares a las hormonas producidos en su cerebro que tienen efectos neurológicos y hormonales en su cuerpo. La dopamina es un neurotransmisor que es responsable de los sentimientos asociados con la motivación y el placer, y puede verse afectada por la presencia de PC en su cerebro. Los niveles bajos de dopamina pueden aumentar los síntomas asociados con la depresión, la psicosis y la esquizofrenia. No se recomienda la suplementación con creatina si padece alguna de estas condiciones.
Creatina y Serotonina
Aunque no es concluyente, la creatina puede afectar la producción de serotonina, que es un compuesto producido en el cerebro que se encuentra principalmente en el tracto intestinal, las plaquetas sanguíneas y en todo el sistema nervioso central, según el "Journal of Hyperplasia Research". La serotonina tiene muchas funciones, incluida la regulación del estado de ánimo, el apetito, el sueño, la memoria y el aprendizaje. Cuando hay cantidades excesivas de creatina en su cerebro, se puede suprimir la producción de serotonina, lo que aumenta el riesgo de desarrollar algunos de los síntomas asociados con niveles bajos de serotonina, como aumento de peso, reducción de la secreción de insulina, depresión y disminución del aprendizaje.
Creatina y deshidratación
Un efecto bien conocido de la suplementación con creatina es la hidratación muscular, que implica la retención de agua corporal en los músculos esqueléticos junto con la creatina. La hidratación muscular puede dejar menos agua disponible para que el resto de las células de su cuerpo funcionen de manera óptima, causando un estado de deshidratación. La deshidratación, o la falta de agua, puede afectar su cerebro al reducir el flujo sanguíneo y el suministro de oxígeno a las células cerebrales. Esto puede hacer que se sienta débil o aturdido y puede aumentar su riesgo de desarrollar ansiedad aguda, nerviosismo y confusión.