El sulfato de calcio, o yeso, no es tóxico. Se usa como aditivo en una variedad de alimentos diferentes, así como en suplementos para ayudar a aumentar la ingesta de calcio. Consulte con su médico antes de tomar suplementos de yeso para asegurarse de que estos sean seguros para usted.
Ingesta de calcio
El yeso contiene entre 23 y 29 por ciento de calcio. Los adultos deben consumir de 1, 000 a 1, 200 miligramos por día de calcio para ayudar a mantener sus huesos y dientes sanos y sus vasos sanguíneos funcionando correctamente. Obtener suficiente calcio y vitamina D en su dieta puede ayudar a limitar su riesgo de osteoporosis y síndrome premenstrual. Otras fuentes de calcio incluyen productos lácteos, sardinas, vegetales de hoja verde y frijoles.
Usar como aditivo alimentario
El yeso se usa para elaborar cerveza y puede ayudar a mantener la claridad y acidez adecuadas en el vino. Como aditivo, ayuda a regular la acidez y a mejorar la estabilidad y la calidad de los alimentos. A veces se puede encontrar en pan blanco, queso azul, helado, harina, vegetales enlatados, pastas, productos lácteos, frutas procesadas, dulces, cereales para el desayuno, productos de soya, productos horneados, carnes o pescados procesados, condimentos, sopas, bebidas alcohólicas., alimentos preparados y bebidas a base de agua.
Posibles efectos secundarios e interacciones
Los suplementos de calcio pueden causar efectos secundarios que incluyen hinchazón, gases y estreñimiento. Si experimenta efectos secundarios, puede ser útil dividir su dosis durante todo el día y tomarla junto con los alimentos.
Los suplementos de calcio pueden interactuar con ciertos medicamentos, incluidos los de osteoporosis, antibióticos, anticonvulsivos y diuréticos. Tomar estos medicamentos junto con calcio podría aumentar el riesgo de efectos secundarios de estos medicamentos e interferir con su efectividad.
Consideraciones
Los adultos no deben consumir más de 2.500 miligramos de calcio por día, ya que esto podría causar síntomas de toxicidad, como náuseas, dolor abdominal, estreñimiento, vómitos, pérdida de apetito, fatiga, presión arterial alta, micción frecuente, confusión y coma. Obtener demasiado calcio podría interferir con la absorción de zinc y hierro, lo que aumenta el riesgo de deficiencias de estos nutrientes.
Elija un suplemento con el símbolo de la farmacopea de los Estados Unidos, ya que estos suplementos han sido probados para verificar que contienen la cantidad de nutrientes enumerados y es menos probable que estén contaminados con sustancias tóxicas, como el plomo.