El zinc es un mineral esencial por muchas razones. La Oficina de Suplementos Dietéticos de los Institutos Nacionales de Salud enumera el zinc como importante para la cicatrización de heridas, para la síntesis de proteínas y para apoyar la función inmune. Es especialmente importante durante el embarazo y la infancia para el crecimiento y el desarrollo. El zinc también promueve una piel sana y puede ayudar a reducir el acné. Está presente en muchos alimentos y también se puede tomar como un suplemento de gluconato de zinc. Se debe consultar a un médico antes de tomar suplementos de zinc para asegurarse de obtener la cantidad adecuada.
Cicatrización de la herida
Debido a que el zinc es importante para la división celular, es compatible con la regeneración de la piel después de ser lesionada por un corte o abrasión. Según la Oficina de Suplementos Dietéticos de los Institutos Nacionales de Salud, los médicos a menudo recomiendan suplementos de zinc para pacientes con úlceras cutáneas. Los suplementos de zinc también pueden ayudar a curar herpes labial, quemaduras, incisiones y otras irritaciones de la piel.
Acné
Los suplementos de gluconato de zinc también pueden ayudar a sanar las lesiones del acné y prevenir la recurrencia del acné. El zinc puede actuar regulando la actividad de las glándulas sebáceas en la piel o reduciendo la inflamación. Según Acne To Health, el zinc ayuda al cuerpo a procesar los ácidos grasos que necesita la piel para sanar y también puede reducir la incidencia de cicatrices después de un brote de acné.
Caspa
La caspa ocurre cuando la piel del cuero cabelludo se desprende con más frecuencia de lo normal, lo que produce descamación excesiva. Los compuestos de zinc a menudo se agregan a los champús anticaspa para ayudar a reducir el desprendimiento. Tomar suplementos de gluconato de zinc también puede ser útil para suprimir la caspa, aunque primero se debe consultar a un médico.
Toxicidad de zinc
Tomar zinc en exceso puede provocar efectos secundarios como náuseas, vómitos, anorexia, calambres, diarrea o dolor de cabeza. No se debe exceder la dosis máxima recomendada de 40 mg diarios para adultos.
