El síndrome del intestino irritable, o SII, es una afección dolorosa que afecta el intestino grueso y puede ser especialmente pronunciada entre los corredores. Correr genera una cierta cantidad de estrés en los intestinos y en algunos casos puede revelar síntomas subyacentes causados por el SII. Afortunadamente, los corredores pueden usar una serie de medidas preventivas para mantener a raya el SII mientras golpean el pavimento regularmente.
Identificación
El efecto del SII en el intestino grueso puede producir una serie de síntomas, incluidos calambres, dolor abdominal, diarrea por estreñimiento y gases hinchados. El SII no daña permanentemente el intestino como otras enfermedades como la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa. La afección se limita a sus síntomas básicos y no provoca inflamación ni cambios en el tejido intestinal.
Efectos
Si bien correr puede ayudar a producir deposiciones regulares y contribuir a reducir los riesgos de cáncer de colon, también puede desenmascarar el SII. El SII no es causado por correr, pero se puede revelar una condición preexistente. El SII y los síntomas que lo acompañan generalmente ocurren durante o después de correr. Hasta la mitad de todos los corredores sufren molestias abdominales generales, incluido el SII. El movimiento ascendente y descendente de correr naturalmente agita los intestinos, mientras que el flujo sanguíneo durante la carrera se desvía de los intestinos a las piernas, lo que abre la posibilidad de calambres o diarrea.
Ayuda dietética
Evitar ciertos tipos de alimentos es importante para las personas con SII. Para los corredores, elegir otros tipos de alimentos es igual de crítico. La mayoría de los corredores están de acuerdo en que cargar carbohidratos puede proporcionar la energía necesaria para completar una carrera. Los alimentos ricos en carbohidratos como el arroz, la pasta, la avena, las papas y el pan blanco contienen un alto contenido de fibra soluble que es fácil para los intestinos. La cafeína, los productos lácteos y los alimentos ricos en fibra pueden mejorar el SII y los pacientes frecuentes deben evitarlos.
Tratamiento medicinal
Si bien no existe una cura para el SII, los corredores pueden aprender a minimizar los síntomas con ciertos tipos de medicamentos. Se ha descubierto que los suplementos de fibra o laxantes ayudan a quienes sufren particularmente de estreñimiento. Muchos medicamentos de venta libre pueden aliviar la diarrea. Los antiespasmódicos se recetan comúnmente para tratar los espasmos musculares del colon y el dolor abdominal. Es importante considerar cuidadosamente un medicamento, ya que un producto recetado para tratar un síntoma en realidad puede estimular uno diferente.
Prevención / Solución
Los corredores que sufren de SII pueden probar una serie de medidas preventivas para que la experiencia de correr sea placentera y sin dolor. Evitar los alimentos al menos dos horas antes de correr ayudará a minimizar el riesgo de que un estómago lleno desencadene la condición durante una carrera. Mantenerse bien hidratado bebiendo muchos líquidos antes y después de correr es un enfoque eficaz para evitar los síntomas. Ejecute rutas que incluyan proximidad a los baños públicos en caso de emergencia; Para carreras o eventos especiales que no incluyen baños, tomar un medicamento antidiarrea antes de correr también puede ser útil.