El aceite de semilla de calabaza, o pepita, tiene varios beneficios para la salud. Un estudio de 2008 publicado en la revista "Phytotherapy Research" reveló que suplementar con el aceite puede reducir el colesterol y la presión arterial gracias a sus fitoestrógenos y fitoesteroles, por ejemplo. El aceite también es una rica fuente de ácidos grasos omega-6 y vitaminas E y K.
Ácidos Grasos Omega-6
El aceite de semilla de calabaza contiene ácido linoleico, un ácido graso esencial graso omega-6. Los ácidos grasos omega-6 son cruciales para el crecimiento y desarrollo normales y para la función cerebral, y ayudan a estimular el crecimiento del cabello y la piel, regular el metabolismo y mantener la salud ósea y el sistema reproductivo, según la Universidad de Maryland (UM) Medical Centrar.
Fitosteroles
Los fitosteroles en el aceite de semilla de calabaza pueden ayudar a reducir el colesterol en la sangre. Los fitosteroles funcionan al interferir con la absorción de colesterol en los intestinos, según el British Journal of Nutrition.
Vitamina e
El tocoferol en el aceite de semilla de calabaza es un poderoso antioxidante, también conocido como vitamina E. Esto ayuda al cuerpo a usar la vitamina K. También tiene un papel en la formación de glóbulos rojos, según el Centro Médico de la UM.
Vitamina K
El aceite de semilla de calabaza es una fuente de vitamina K. Esta vitamina puede ayudar a promover huesos fuertes en las personas mayores. Es necesario para todos, revela el Centro Médico de la UM, porque la sangre no se uniría ni se coagularía sin ella.
Fitoestrógenos
El aceite de semillas de calabaza es una rica fuente de fitoestrógenos, una propiedad que ayudó a disminuir la presión arterial sistólica y diastólica en ratas durante un estudio de 12 semanas sobre la suplementación de aceite de semilla de calabaza, según M. Gossell-Williams, autor del 2008. estudio publicado en "Phytotherapy Research".