El suplemento dietético niacina es un tipo de vitamina B que puede usarse para reducir los niveles altos de colesterol y tratar la deficiencia de niacina. Los profesionales de la salud del Centro Médico de la Universidad de Maryland recomiendan que los adultos consuman diariamente entre 14 y 18 mg de niacina para mantener niveles óptimos de salud. Si toma este suplemento, hable con su médico sobre los posibles efectos secundarios que la niacina puede tener en su nivel de presión arterial.
Disminución de la presión arterial
La niacina funciona al dilatar los vasos sanguíneos de su cuerpo. La dilatación de los vasos sanguíneos causa una disminución temporal en sus niveles de presión arterial porque el corazón no necesita trabajar tanto para empujar la sangre a través de su cuerpo. Si le han diagnosticado presión arterial baja, debe evitar tomar niacina, advierte MedlinePlus. El uso inadecuado de la niacina por personas con presión arterial baja puede provocar una caída severa de la presión arterial y puede conducir a la pérdida del conocimiento.
Interacciones de medicación
Este suplemento no debe usarse junto con medicamentos alternativos para la presión arterial, como felodipino, diltiazem o amlodipino, informa Drugs.com. El uso concomitante de niacina con medicamentos para la presión arterial puede aumentar los efectos de estos medicamentos. En consecuencia, puede desarrollar una presión arterial inusualmente baja y puede experimentar mareos intensos, dolor de cabeza o desmayos. También debe evitar tomar este suplemento de vitamina B-3 si también está tomando anticoagulantes, medicamentos para el corazón u otros suplementos que contengan niacina.
Efectos secundarios adicionales
Mientras recibe tratamiento con niacina, puede experimentar efectos secundarios. El enjuague con niacina es el efecto secundario más común del tratamiento y puede causar enrojecimiento facial o sensaciones inusuales en la piel, como picazón, ardor u hormigueo, informa el UMMC. Los efectos secundarios adicionales pueden incluir náuseas, diarrea, insomnio, piel seca, sudoración, mareos o escalofríos. Busque atención médica inmediata de su proveedor médico si experimenta algún problema cardíaco o respiratorio, como un ritmo cardíaco irregular o falta de aliento.